Dos décadas impulsando en el concejo de Llanes y en toda la comarca la práctica deportiva más antigua e inculcando en personas de todas las edades valores de sacrificio y superación. Eso es lo que desde febrero de 1998 lleva haciendo el Club Oriente Atletismo (COA). En tan solo unos meses soplarán veinte velas con la ilusión intacta por seguir fomentando la práctica del deporte rey en todas las modalidades. En este tiempo han pasado por el COA medio millar de atletas de todas las edades. Al frente del club desde sus inicios está la persona que más ha luchado por el atletismo en Llanes: Paco Martínez Soliño.
Todo empezó en la localidad llanisca de Nueva gracias a un grupo de amigos en los que, además del propio Paco Martínez, estaban Jorge Villa, Félix Avín y Joaquín González. "Corríamos la San Silvestre de Ribadesella. Jorge González estudiaba magisterio por Educación Física y nos animamos a formar un club", explica Martínez Soliño.
El 7 de enero de 1998 el Club Oriente de Atletismo se registró de manera oficial. "Desde el principio tuvimos muy claro que queríamos hacer un club para toda la comarca, no solo para Llanes", explica Martínez. Corría el día de San Valentín de 1998 cuando cuatro enamorados del atletismo iniciaron la aventura con el primer entrenamiento del COA. "Éramos unos veinte atletas de la zona del Valle de San Jorge, y nuestra primera competición fue en Zardón (Cangas de Onís), durante una carrera que se organizó con motivo de las fiestas de San José", recuerda el presidente.
La equipación que estrenó el club tiene su historia. "Logramos sendas camisetas de Rocío Ríos, quinta en maratón en los JJ OO, y de Martín Fiz, que en aquellos años era campeón del mundo, e hicimos un sorteo. Vendiendo papeletas conseguimos cien mil pesetas y con eso compramos las primeras equipaciones. Eran las más baratas del mercado y una réplica de las de la selección de Marruecos, pues utilizaban el color rojo y verde, el mismo que el de la bandera de Llanes", recuerda Martínez. En noviembre de ese año participaron en la primera competición fuera de Asturias en Ajo, Cantabria.
Los entrenamientos en Nueva tenían lugar en el patio y los alrededores de las antiguas escuelas. Al poco dieron el salto a Llanes. En las viejas instalaciones de La Encarnación sacaron todo el partido del mundo a una pista de 100 metros, un foso de salto de longitud y un pequeño circuito iluminado de unos 400 metros en los alrededores del polideportivo. La remodelación de esta zona deportiva y la construcción de una piscina y de una bolera les dejó sin unas instalaciones dignas. Fue el momento más delicado del club.
"En 2009 pasamos un periodo difícil por la falta de espacio y nos faltó poco para hincar la rodilla. Éramos 10 atletas y entrenábamos en las calles iluminadas de la zona de las Malvinas. Estuvimos a punto de tirar la toalla", recuerda Paco Martínez. La perseverancia de los miembros del COA no decayó y en el año 2010 se aprobó la construcción de una pista de atletismo junto al campo de fútbol de La Corredoria, en Posada, que se inauguró en febrero de 2011. "Ahí cambió todo", sostiene el alma mater del COA.
"Nosotros hemos apostado siempre por el deporte base. Ese fue siempre nuestro principal objetivo. En 2008 saqué el título de entrenador nacional y se unió al club Verónica Pérez, una atleta muy potente que antes jugaba al fútbol, lo que sirvió para dar a conocer el club y ganar prestigio. A día de hoy el club cuenta con 80 atletas de todas las edades y cinco entrenadores", dice.
Los primeros triunfos del COA los logró Fernando Muñoz en el campeonato de Asturias de cross escolar. La plata en el campeonato de España de media maratón por equipos en 2015, el bronce en 2017 y el bronce de Claudia Balmori en los 800 metros del campeonato de España de 800 metros son algunos de los grandes logros del club. "Hay que inculcar una educación deportiva y la cultura del esfuerzo. Eso es clave para triunfar en el deporte y en la vida", asegura Martínez. Entre las fieles personas que han estado a su lado en esta aventura destaca, entre otros, a José Antonio García. "Hemos pasado muchas mojaduras juntos. Ojalá hubiera mucha más gente como él", sostiene.
Para celebrar el veinte aniversario planean hacer una exposición en la Casa de la Cultura de Nueva con fotografías, equipaciones y medallas. Entre tanto siguen corriendo lo más rápido que pueden, saltando para esquivar el listón y lanzando la jabalina lo más lejos posible.
