"Preocupados". Así se encuentran los ganaderos por el cierre del matadero comarcal de Margolles. El macelo, único escollo que impide desde hace años disolver la mancomunidad de concejos del Oriente, fue desalojado el jueves por orden judicial. El resultado: los clientes tendrán que despiezar el ganado en Gijón o Mieres, invirtiendo más tiempo y dinero en el transporte.

Ganaderos como Valeriano Remis mostraron ayer su disgusto por el brusco cese del servicio. Remis urgió una reunión entre alcaldes de la zona, representantes del Principado y ganaderos para encontrar una fórmula que permita reabrir el macelo "de forma rápida pero con todas las garantías". La portavoz de Foro de agroganadería en la Junta, Carmen Fernández, reclamó ayer al Principado que acometa las obras necesarias para cumplir con la normativa sanitaria vigente y reabrir el matadero de Margolles a la mayor brevedad posible.