Buena ocupación en el puente para cerrar un "gran año". Eso es lo que esperan los hosteleros de la comarca oriental asturiana para el inminente puente. Eso sí, no dejan de mirar al cielo, ya que opinan que el tiempo es fundamental. Y no sólo esperan que no llueva, sino que además lo ideal sería que no nevara para que los turistas no decidieran cambiar sus vacaciones en el Oriente por una escapada a las estaciones de esquí.

En el concejo de Llanes hay buenas perspectivas para el puente de la Constitución y de la Inmaculada. "Va a ser un buen puente", sostiene el máximo responsable de la Asociación Llanisca de Restaurantes (Allares), Javier Garaña. Confía en que la llegada de turistas llene de gente las calles. Asegura también que las buenas previsiones que hay en relación al tiempo son un punto a favor.

Para el presidente de Allares, la llegada de personas con segunda residencia en el concejo supondrá una parte fundamental de la clientela de los establecimientos de hostelería durante estos días. "La segunda residencia es muy importante para Llanes, y fuera de temporada, como es el caso, más aún. Es lo que más desestacionaliza el turismo en Llanes", subraya Garaña. Bajo su punto de vista, un buen puente de diciembre sería la culminación perfecta a un "gran año" para el sector servicios de Llanes.

Optimista también se muestra el presidente de la Asociación Fomento del Turismo de Llanes y Ribadedeva, Ángel Bada. "Es difícil hacer una previsión de ocupación, pues hay hoteles cerrados", matiza. Bada indica que los días festivos, este año, "coinciden de manera perfecta". "Confío en que los hoteles que permanezcan abiertos tengan una buena ocupación", señala Bada.

El comienzo del mes de diciembre se presenta "prometedor" también en Cangas de Onís, según el presidente de la Asociación de empresarios de la comarca asturiana de los Picos de Europa (Incatur), Toño Sánchez, quien augura una ocupación hotelera cercana al 80% para el puente de la Constitución y la Inmaculada. "Si mantienen abierta y limpia la carretera a los Lagos, mucha gente se acercará a disfrutar de esta postal navideña tan única", reflexiona. No obstante, Sánchez teme que la apertura de las estaciones de esquí reste afluencia de público en la zona. "Hay gente que espera para hacer la reserva de última hora y es posible que si caen cuatro copos opten por un destino cercano a las estaciones de esquí, que otros años a estas alturas estaban cerradas", lamenta. En total son 3.067 plazas de alojamiento las que ofrecen los asociados de Incatur, aunque algunas instalaciones anunciaron su intención de no abrir sus puertas al público para el festivo por ser temporada baja. Los días de máxima ocupación serán el viernes y el sábado. Madrileños, vascos o gallegos son los clientes más habituales en estas fechas.

También hay varios hoteles cerrados por estar fuera de temporada alta en Ribadesella, donde la ocupación de los que sí que van a abrir sus puertas durante el puente va a estar en torno al 50%, según estima el presidente de la Asociación de Alojamientos de Turismo Rural (Aitur) del concejo riosellano, Sabino Martínez, quien también comenta que "las casas rurales van a tener más gente que los hoteles". Martínez califica este puente de "atípico", porque depende mucho del tiempo, ya que si nieva es probable que algunos turistas "prefieran las estaciones de esquí". Además, Martínez apunta el objetivo que deben tener los hosteleros de Ribadesella de cara al futuro. "La situación del turismo no es mala, va mejorando y se va recuperando de la crisis, pero el gasto que hacen los turistas sigue siendo menor al que hacían antes y sería muy importante cambiar eso", dice Martínez. A pesar de esto, calificó el año como "bastante bueno" para la hostelería riosellana.

El mismo objetivo se marcan desde la Asociación Colunguesa de Turismo (Acotur), como explicó su secretario, José Luis Cueli. "Hay buenas previsiones. No nos podemos quejar porque venimos de una crisis, pero ahora queremos repercutirlo en que la gente gaste más dinero", comenta. Además, en Colunga juegan con la ventaja de que este fin de semana es la Feria de les Fabes, por lo que "la hostelería va a mover mucha gente".

En Piloña también se están buscando formas de atraer a turistas. La ampliación de horarios de instalaciones culturales, como la muestra del Sidrón, en el edificio de la Obra Pía de Infiesto, es uno de los revulsivos con los que cuentan para atraer visitantes. El presidente de la Asociación Piloñesa de Turismo (Aspitur), Gustavo Sánchez, confía en que la ocupación hotelera se sitúe en torno al 65% en el puente, como ya ocurrió el año pasado. "Hay que tener en cuenta que las reservas de última hora se han visto muy lastradas por el mal tiempo", explica.

Y en Parres, El presidente de la asociación Hostelería y Turismo (Hotupa), Belisario Súarez, estima que más de la mitad de las plazas hoteleras se cubrirán en este puente en el concejo: "Si el tiempo respetara, se alcanzarían unas cifras aceptables, como ya ocurrió el año pasado".