Dar subvenciones a emprendedores que inviertan en el mundo rural en lugar de concederlas a polígonos del centro de la región "como viene sucediendo", disminuir las restricciones en los parques naturales y hacer a los vecinos partícipes de su gestión e incentivar a las empresas privadas con ayudas fiscales para que se instalen en los pueblos son, a juicio de la Federación Asturiana de Parroquias Rurales de Asturias (FAPAR), algunas de las medidas para recuperar población que ayer trasladaron el consejero de Presidencia del gobierno del Principado, Guillermo Martínez, durante el transcurso de la asamblea anual de este organismo que se celebró en la localidad piloñesa de Villamayor.

Martínez desgranó a los representantes de las 39 parroquias rurales presentes en la reunión las líneas maestras del Plan Demográfico para Asturias 2017-2027. Andrés Rojo, presidente de la parroquia rural de Villamayor y máximo responsable de la Federación Asturiana de Parroquias Rurales, y José Manuel García del Valle, secretario, hicieron la veces de anfitriones. La federación dejó entrever que el plan llega tarde y que está incompleto.

Más medidas propuestas desde FAPAR: potenciar los equipos forestales de silvicultura para desbroce y cuidado de los montes e invertir en prevención en lugar de gastar importantes cantidades en la extinción de incendios, precios justos por la leche y un mayor reconocimiento a la mujer por su participación en tareas agrarias y ganaderas. Apuesta también FAPAR por las concentraciones parcelarias tanto agrícolas como forestales para acabar con el minifundio, la diversificación en el campo y la potenciación de la biomasa para fuentes caloríficas y energéticas. Tener buenos accesos a internet y una fiscalidad reducida para determinadas actividades son otras de las propuestas lanzadas desde la Federación Asturiana de Concejos lanzaron.

Buscar colonos repobladores, promover actividades agrarias y ganaderas, potenciar el orgullo de ser de pueblo y hacer todo lo posible para recobrar la "autoestima rural" con el objetivo de que se valore algo que durante tantas décadas no se ha apreciado son otras de las algunas de las medidas indispensables desde el punto de vista de FAPAR para poder crear empleo, modernizar este espacio y poder llevar población a los núcleos rurales de la región.

Desde la Federación Asturiana de Parroquias Rurales señalaron que no se superará el problema demográfico que afecta a Asturias solo con promover actividades agrarias y ganaderas y pidieron una mayor implicación de los políticos estatales y autonómicos "para apostar por el medio rural". "La solución no es el cambio de un decreto o una ley, es la implicación de todas las administraciones y organismos para buscar una solución conjunta de todos los estamentos", aseguraron.

Martínez defendió el plan demográfico y lo calificó de muy importante "para el presente y para el futuro de la región". Señaló que con su aplicación pretenden "posibilitar y facilitar que todas las personas que lo deseen puedan desarrollar aquí un actividad económica y no exista la dicotomía actual entre área metropolitana y área rural". El plan demográfico 2017- 2027 cuenta con 216 medidas y un presupuesto de 2.200 millones de euros. "Hemos pasado de las valoraciones a los hechos y hacemos un llamamiento al consenso de los grupos en la Junta General y de todos los agentes sociales", dijo.