Los riosellanos disfrutaron de los Reyes Magos, que llegaron en barco ante la expectación de las decenas de niños que se agolpaban para poder trasladarles sus deseos para esta noche. La comitiva real compuesta por cinco carrozas y casi cien figurantes ataviados de romanos, egipcios y hebreos, recorrió las principales arterias de la villa para acabar recibiendo a los pequeños -en la foto, Melchor- en la Plaza Nueva, informa C. MURUZÁBAL.