El consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, se comprometió ayer en la reunión que mantuvo con el alcalde de Parres, el socialista Emilio García Longo, a solicitar al Gobierno central la transferencia de la titularidad del puente "Emilio Llamedo", que sirve como entrada a Arriondas por la carretera nacional y que necesita varios arreglos, como el ensanche de sus aceras.

"El Principado hará una solicitud de transferencia y negociaremos algunas de las condiciones con el Ministerio de Fomento", anunció Lastra. Para él, ésta es la solución "más práctica" para reformar el puente que comparten Parres y Cangas de Onís. Su intención es incorporar esta obra a la programación de carreteras. "Tenemos que ver si estamos en condiciones de que esta actuación pueda empezar a tramitarse en 2018, una vez que se culmine la transferencia con éxito, y poder tenerla programada en 2019", dijo el consejero. Sobre este tema, el director general de Infraestructuras y Transportes, José María Pertierra, opina que el cambio de titularidad "no entraña demasiada dificultad".

También preocupan en el concejo parragués las inundaciones, sobre todo, tras las sufridas en 2010. Por eso, Lastra ha dicho que está en condiciones de establecer un convenio con el Ministerio de Medio Ambiente para llevar a cabo un plan para gestionar el riesgo que tiene Parres "y de discutir las participaciones" en él. De hecho, ya existe un proyecto presupuestado en 15,3 millones. Ahora, el consejero se encuentra a la espera de que el Estado se ponga en contacto con la consejería para valorar el nivel de riesgo, algo que espera que ocurra en los próximos días. Admite el "riesgo de inundaciones" en Arriondas y por eso es "prioritario".

Por su parte, el alcalde de Parres, García Longo, quiso agradecer la "buena disposición y receptividad" del consejero ante los problemas del concejo.

Por último, el director general de Calidad Ambiental, Manuel Gutiérrez, dijo que las obras de mejora en la red de abastecimiento que se están llevando a cabo en el concejo parragués están a punto de terminar. Los trabajos, con un presupuesto de 54.450 euros, incluyen la mejora del depósito de La Toya, un depósito pequeño en el Collau l'Andrín y la mejora de la captación y cloración en el sistema de abastecimiento de Les Dueñes.