Los malos olores vuelven estos días a ganar protagonismo entre la zona del puente de Llanes y la pasarela. El ocle estancado en este lugar, en su gran mayoría en estado de putrefacción, genera un desagradable e intenso olor coincidiendo, sobre todo, con la bajamar. La situación no es nueva en esta parte de la villa, donde hosteleros y vecinos ven lo que está pasando con una mezcla de resignación y cierta naturalidad.

Según explican los afectados, hace más de quince días que los ocleros no hacen acto de presencia para retirar las algas. Durante las pasadas Navidades la actividad junto al puente fue abundante de madrugada. Una persona que participó en los trabajos para retirar el "oro rojo" acumulado debajo del puente sostiene que, a paladas, se llegaron a sacar en una sola noche unas ocho toneladas de material. El hecho de que el ocle acumulado aquí se mezcle con el agua dulce del río Carrocéu y que los colectores de la zona, cuando llueve en abundancia, suelten a la ría aguas sin depurar trae como consecuencia que el material acumulado junto al puente no sea muy atractivo para los compradores. A todo esto hay que unir lo costoso del trabajo para sacarlo, lo que hace que se pudra sin que nadie lo retire.

"El ocle da malos olores, es cierto, pero también las tuberías, pues cuando llueve mucho se vierte porquería de todo tipo", señala un hostelero. Para las lanchas que amarran en los pantalanes situados entre la pasarela y el puente, la proliferación de ocle estancado y la falta de dragado hace que, para buena parte de ellas, comience a ser complicado salir en marea baja al quedarse varadas.

Antonio Cue Fuentecilla, cuya lancha está amarrada en frente de la plaza del muelle, asegura también que el ocle es un hándicap para las lanchas y "un incordio para las hélices. Puede llegar incluso a romperlas".

Por parte del Ayuntamiento de Llanes, el edil de Obras, Juan Carlos Armas (PP), sigue con atención lo que está pasando en el puerto deportivo. "Si el asunto de los malos olores se convierte en un problema para la salud pública, intervendremos, pero no debemos olvidar que las competencias en esta infraestructura pertenecen a Puertos", dijo. Armas señaló que estará en contacto con los responsables de este organismo para pedir, si fuese necesario, que retiren las algas para acabar con los malos olores.