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Llanes, tras la obra en la rula, ve clave la ampliación del puerto en La Tijerina

"Garantizaría que la mar no rompa contra los barcos en invierno", dice Ángel Batalla

Ángel Batalla en la zona ampliada de la rula, ayer. EMILIO G. CEA

El edificio de la rula de Llanes mejora sus prestaciones. El pasado jueves se dieron por finalizadas, a falta de pequeños remates, las obras de ampliación del centro de operaciones de los marineros de la cofradía de pescadores Santa Ana de Llanes. La mejora de la cancha de subastas en 70 metros cuadrados era una necesidad para la cofradía llanisca desde hace años, acrecentada más si cabe en el último año debido a la gran cantidad de barcos que venden sus capturas en la villa de Posada Herrera. Con este objetivo logrado, las demandas de los pescadores de Llanes, en especial teniendo en cuenta el duro invierno que están soportando en cuanto a temporales se refiere, se centran ahora en la necesidad de construir un nuevo muelle de amarre justo debajo de La Tijerina, en pleno barrio de San Antón.

"La ampliación del puerto en la zona de La Tijerina es la principal demanda que tenemos ahora mismo, una vez lograda la ampliación de la rula. No es de recibo que nuestros barcos soporten estos temporales y los golpes de mar que nos caen encima año tras año", manifestó ayer el patrón mayor de la cofradía de pescadores Santa Ana de Llanes, Ángel Batalla. El Gobierno de Principado es conocedor de esta necesidad desde hace tiempo. "En inviernos duros como este, los barcos, donde están amarrados ahora, soportan golpes continuamente. Es un sin vivir constante para todos nosotros pues estamos todo el día pendientes de que no tengan daños", señala Batalla.

La propuesta de los marineros llaniscos para mejorar el puerto pasa por construir un muelle en forma de u en la zona de San Antón para amarrar los pesqueros justo debajo de La Tijerina, y en la eliminación del espigón donde en la actualidad amarra la lancha de Salvamento Marítimo. "Eso garantizaría que la mar no salte y rompa sobre los barcos, como ocurre ahora", explica el patrón mayor. A su vez, esta nueva disposición del puerto implicaría la posibilidad de ganar un mayor espacio de atraque durante todo el año.

"Con estas mejoras tendríamos un súper muelle y ganaríamos en tranquilidad y en seguridad. Los temporales no nos afectarían para nada. La escollera que queremos frenaría los golpes de mar y haría también que entrase menos arena al puerto, lo que acabaría con los problemas de calado. Cada vez que hay un temporal no hacemos otra cosa que estar pendientes de las olas que saltan a los barcos. No podemos irnos a casa tranquilos", asegura Batalla. Los marineros llaniscos sostienen que, con la configuración del puerto que proponen, sobraría la compuerta del puerto deportivo. "Es una pena que no se hiciera antes. Con el dinero que se gastaron en la compuerta y en sus reparaciones se podría haber construido el muelle, que además protegería el puerto deportivo", manifiestan.

Las obras recientemente finalizadas para ampliar la rula han servido para ganar, aproximadamente, 140 metros cuadrados: sesenta en la planta baja, donde está la zona de subastas, y otros setenta en la parte de arriba, que será destinada a almacén. En la parte de abajo, además, han cedido de manera gratuita un despacho de 13 metros cuadrados a Salvamento Marítimo. A su vez, se ha mejorado el suelo y se han adecentado las paredes. En la parte de arriba se ha mejorado la ventilación de la sala de máquinas, las cuales tenían problemas de funcionamiento. Las obras han costado en torno a 100.000 euros.

En relación al dragado, urge la limpieza de la zona de desembarque del puerto, ubicada delante de la rula. Las tareas para limpiar los fondos iban a ser ejecutadas por Infraestructuras a finales del año pasado, junto a las llevadas a cabo desde tierra con máquinas retroexcavadoras para limpiar la dársena de amarre, de donde se sacaron 4.000 toneladas de lodo y fango. Los trabajos se hicieron desde tierra por la presencia en este lugar de materiales contaminantes entre los lodos que desaconsejaban su vertido al mar.

"Nos habían prometido hacerlo antes de final de año, pero quedó sin hacer. Que lo haga 'La Nalona' (la draga) cuando venga. Yo creo que esta parte no está contaminada. Se debería haber hecho antes, pero ahora, con la campaña de la xarda encima, no queremos tener aquí un zafarrancho de combate. En marea baja, con mareas grandes, varamos", añadió Batalla.

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