La gestión de los recursos cinegéticos de Amieva enfrenta al equipo de gobierno local forista, partidario de crear una reserva regional de caza en el concejo -dependiente del Principado-, con la asociación de cazadores "Sierra de Borde", de Oviedo, que aboga por mantener un coto bajo control privado, como hasta ahora.

La asociación "Sierra de Borde", que hace años tuteló los derechos cinegéticos de Amieva, mantuvo ayer un encuentro en Sames con vecinos para explicarles los motivos que la llevaron a presentar alegaciones contra la declaración de la reserva de Amieva, que esperan sea impugnada a beneficio del coto.

La Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente sacó a información pública el pasado 4 de enero la declaración de la Reserva Regional de Caza de Amieva, después de que la asociación "Ríu Melón", que en los últimos cinco años había gestionado el coto del concejo, anunciase en verano el cese de su actividad. Un cese muy criticado por los vecinos, que aseguran haber sufrido cuantiosos daños cinegéticos en sus propiedades no compensados por la directiva saliente.

El abogado de la asociación "Sierra de Borde", José Bembibre, apuntó ayer en Sames que la propuesta del Principado para crear una reserva de caza en Amieva carece de motivación y justificación. "Se hizo sin consultar previamente con las partes interesadas, precipitadamente. No consta información técnica ni jurídica que avale y justifique la decisión adoptada", dijo. Bembibre hizo referencia, además, a la ausencia de información económica o presupuesto para la eventual gestión. "Es un hecho que son deficitarias y antieconómicas, careciendo de medios", apuntó. "¿Está dispuesta la empobrecida a la par que envejecida sociedad asturiana a tener que sufragar los costes económicos de dicha reserva?", se preguntó.

El representante legal de la asociación "Sierra de Borde" manifestó ayer su sorpresa por la carencia de control y gestión del Principado sobre la sociedad saliente, "Ríu Melón", en cinco años. También por la "falta de rigor" de la propuesta impugnada, ya que, según su versión, los límites de la reserva son erróneos.

Bembibre avisó de que la declaración podría acarrear restricciones en los usos del terreno y de que el supuesto canon cinegético que percibiría el Ayuntamiento, cercano a los 30.000 euros, podría no ser tal. El alcalde de Amieva, el forista José Félix Fernández, intervino entonces para desmentir tales afirmaciones. El regidor reprochó al abogado el estar "creando una alarma social sin fundamentos". "No va a haber más restricciones por ser reserva de caza. Eso es falso. El concejo ya cuenta con máximas restricciones por formar parte del Parque Nacional de los Picos de Europa y de la Red Natura 2000, y además eso no tiene nada que ver con la ley de caza, está mezclando cosas para asustar a la gente", afirmó. En cuanto al canon a percibir, Fernández apostilló que "es para el Ayuntamiento, no para el alcalde", y "que se hace en base a unos barómetros: mejor ingresar poco que cero como hasta ahora".

El Alcalde de Amieva defendió su postura a favor de la reserva escudado en que "hasta ahora hubo muchos problemas para que los vecinos afectados por daños cinegéticos cobraran indemnizaciones", algo que, según su opinión, no pasará con una gestión pública.

El regidor apuntó, además, que salvo la asociación "Sierra de Borde", nadie presentó alegaciones a la reserva regional de caza en el plazo de exposición pública.

El canon que percibe el consistorio depende del número de hectáreas -en el caso de Amieva son 7.390- y de la riqueza cinegética.

El jefe de servicio de Caza y Pesca del Principado, Orencio Hernández, aseguró en su última visita a Amieva, el pasado 24 de enero, que la treintena de cazadores locales gozarían de un 50% de bonificación en las cacerías y que tendrían derecho, como mínimo, a participar en el 36% de los recechos y en el 47% de las batidas que se celebren anualmente en el concejo.

El año pasado se cazaron en Amieva unos 90 jabalíes y casi una decena de corzos.