La localidad colunguesa de Huerres finalizó ayer su VII Certamen del Oricio, que despachó 2.000 kilos del manjar marino y decenas de cajas de sidra.

La veda existente en el Principado para capturar oricios, que se mantendrá como mínimo hasta septiembre, obligó a la organización a traer el producto de Galicia. "Esperamos que el próximo año se pueda degustar oricio asturiano y que el certamen vaya a más. La respuesta del público es buenísima", señaló la cocinera Belén Suárez.

La Dirección General de Pesca restringió en 2016 a mariscadores la captura de oricios con el fin de garantizar su sostenibilidad. Los especialistas achacaron entonces el retroceso de la especie a la sobreexplotación del recurso, provocado en buena medida por los furtivos y las empresas conserveras dedicadas a la elaboración de productos "delicatessen". La prohibición fue mal acogida por los mariscadores de la región, que confían en poder volver a la actividad la próxima temporada.

Hasta la carpa del certamen de Huerres se acercaron ayer lugareños como Armando Vigil, que en sus años mozos tenía como afición bajar al pedrero de Huerres a capturar oricios. "Había tantos que se recogían a sacaos. Venían vecinos de todo el municipio con burros para cargarlos", contó este vecino de 82 años. "Los oricios gallegos están muy buenos pero esperemos que el año que viene tengamos en la mesa los asturianos porque tienen un saborín especial", constató.

Durante los dos días que duró la actividad gastronómica en Huerres se pudieron degustar una docena de oricios, crudos o cocidos, con botella de sidra, al precio de quince euros. La oferta la completaron especialidades como empanadas, croquetas o tortillas.

El Certamen del Oricio de Huerres inició su andadura hace siete años de la mano de los vecinos Javier López y Juan Riestra, que forma desinteresada pusieron en marcha la actividad para promocionar la localidad colunguesa y sus recursos. "Apenas somos 70 habitantes pero gracias a iniciativas como esta empiezan a conocernos y seguimos creciendo. En la primera edición despachamos 300 kilos y ahora ya vamos por las dos toneladas", ejemplificaron los promotores. López y Riestra destacaron el hecho de que en el programa siempre se incluyan actividades culturales como conciertos o talleres con reconocidos chefs.

Entre las decenas de personas que ayer participaron en las jornadas gastronómicas se encontraba el alcalde de Oviedo, Wenceslao López. "Tengo parientes en la zona y suelo venir siempre porque está todo riquísimo", dijo.