Regular la población del lobo en el parque nacional de los Picos de Europa resultará a partir de ahora más sencillo gracias a un protocolo que ayer recibió la bendición de la comisión de gestión del espacio protegido. El protocolo, que elimina trabas burocráticas para realizar controles de población, queda ahora pendiente de recibir el visto bueno del patronato del parque nacional, ya que la reunión que celebró ayer este organismo consultivo no fue operativa: la amenaza de impugnación por parte de los patronos ecologistas por irregularidades en la convocatoria la convirtió en un encuentro meramente informativo, sin votaciones. Precisamente los colectivos conservacionistas ya han manifestado su oposición al protocolo que facilita la eliminación de lobos.

La comisión de gestión del parque nacional, reunida ayer en Oviedo y presidida por primera vez por el consejero de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Fernando Lastra, ha informado favorablemente un protocolo que posibilitará "una gestión racional de la especie" y, a la vez, "garantizará su conservación", según las autoridades asturianas. La regulación de la población de lobos se realizará con criterios biológicos y de compatibilidad con otros usos compatibles del parque, particularmente la ganadería extensiva. El protocolo posibilitará eliminar lobos en función del número de ejemplares estimado, el éxito reproductor y los daños registrados en las cabañas ganaderas. Habrá cupos de extracción, hasta un máximo del 20 por ciento de los ejemplares de cada manada (uno de cada cinco). También se permiten controles excepcionales. El protocolo empezará a aplicarse el 1 de octubre de este año.

La comisión de gestión y el patronato analizaron las actividades que el Estado organizará con motivo de la conmemoración del centenario del parque nacional. Están previstos diversos eventos en el Senado, una visita al parque de diputados y senadores, y una serie de conferencias y exposiciones itinerantes.

El orden del día incluía asuntos como el estado de elaboración del borrador de Plan Regulador de Uso y Gestión (PRUG) y del Plan Económico y de Compensaciones, que se someterá a información pública una vez que concluyan los trabajos cartográficos actualmente en marcha. Lastra señaló que el proceso para cerrar el PRUG podría prolongarse durante todo este año.