Plantar cara al sedentarismo. Eso es lo que propuso ayer el director general de Salud Pública del Principado, Antonio Molejón, en el acto institucional por el Día mundial de la actividad física que se celebró en Infiesto. "Cuando la inactividad se vuelve rutina, favorece la apatía, el aburrimiento y la enfermedad", dijo Molejón, que estuvo acompañado por la teniente de alcalde piloñesa, Patricia Ferrero.
Su opinión la compartía M.ª Jesús Rodríguez, enfermera del centro de salud de Infiesto y coordinadora de la mesa intersectorial de Piloña. "Hacer ejercicio es el mejor seguro de salud a corto y largo plazo. Está demostrado que las personas activas son poco dadas a tomar pastillas y se recuperan antes de las enfermedades", afirmó. Por eso invitó al público a mejorar la función cardio-respiratoria con cinco caminatas por semana de treinta minutos cada una. Más trucos: no se debe estar más de dos horas sentado, para fortalecer los músculos conviene trabajar la huerta y para prevenir caídas entrenar el equilibrio.
De resaltar los beneficios del deporte se encargó el profesor de Educación Física del instituto de Infiesto, Sebastián Guerrero, quien lamentó que su asignatura compute cinco veces menos que otras para las notas finales. "Mientras que en países del entorno se imparten tres o cuatro horas por semana, aquí solo tienen hora y media", se quejó. Guerrero reclamó la puesta en marcha de tutorías para las familias en las que se proporcionen estrategias que "arrastren a los hijos" a hacer deporte junto con los progenitores. El docente exigió que los proyectos deportivos municipales sean ejecutados por profesionales de la Educación Física y que se promocione la existencia de instalaciones y actividades variadas "para que cada joven encuentre la que más le motive".
