El Instituto de Enseñanza Secundaria Obligatoria (IESO) El Sueve, de Arriondas, ha solicitado a la Consejería de Educación la implantación del Bachillerato de Ciencias en el centro.

Los padres de muchos jóvenes del concejo llevaban años reclamando este servicio educativo, pero la falta de aulas que sufría el IESO hacía hasta ahora inviable su puesta en marcha. Las limitaciones de espacio no serían un problema desde que, a comienzos de las vacaciones de Semana Santa, se iniciaran en el centro unas obras para crear dos nuevas aulas y un laboratorio. Además, se redistribuiría el uso que se está dando a otros espacios.

La propuesta de poner en marcha el Bachillerato en Arriondas contaría con el respaldo de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del IESO, así como del Ayuntamiento de Parres y el Consejo Escolar.

En la actualidad, la mayoría de los alumnos de El Sueve al acabar la enseñanza obligatoria continúa la formación en el instituto de Cangas de Onís, que atraviesa problemas desde que en 2014 se detectaran deficiencias estructurales en uno de sus edificios, lo que obligó a instalar unas aulas portátiles provisionales en el patio para impartir algunas clases.

La solicitud presentada ante la Consejería se centra en la petición de impartir al menos la línea de Ciencias, aunque apunta a que sería deseable que se facilitaran los estudios a todos los que viven en Parres y alrededores en otros ámbitos como las Humanidades.

La dirección del IESO El Sueve resaltó el ahorro en becas de transporte y el beneficio que reportaría para el mantenimiento del entorno rural del concejo, entre otras cosas.

Las dos nuevas aulas del instituto de Arriondas se ganan gracias a una transformación del salón de actos, que pasará a ubicarse en el gimnasio, ya que en la práctica los alumnos llevan tiempo recibiendo las clases de Educación Física en el patio del centro o, alternativamente, en las instalaciones deportivas del vecino colegio de Arriondas.

Algunos progenitores señalan la conveniencia de construir, a largo plazo, un nuevo centro educativo, ya que, además, el actual se encuentra en una zona calificada como inundable, tal como quedó demostrado con las grandes riadas de junio de 2010.