Duro varapalo para el PSOE de Llanes. Los exediles socialistas Esther Bustillo y Emilio Carrera han sido condenados a siete años de inhabilitación especial para empleo o cargo público cada uno, como autores de un delito de prevaricación administrativa. A su vez, deberán hacerse cargo de las costas derivadas del proceso judicial. Según la sentencia, ambos, cuando ejercían respectivamente como concejales de Contratación y de Deportes, dividieron un contrato para reformar el vestuario masculino y renovar la cubierta del campo de golf municipal, posibilitando que fuera adjudicado "a dedo" a una empresa local. La sentencia no es firme y contra la misma cabe recurso.

El fraccionamiento de la obra permitió "evitar la participación de otros empresarios, vulnerando la ley", reza el fallo. Los hechos tuvieron lugar durante el último mandato como Alcaldesa de Llanes de Dolores Álvarez Campillo. Emilio Carrera, peso pesado del PSOE llanisco, ocupó el número tres de la lista del PSOE en las elecciones de 2015, renunciado en junio de 2016 a su acta como concejal "por motivos personales". El juez, a la hora de dictar sentencia, ha asumido la totalidad de los argumentos de la fiscalía.

En el fallo, hecho público en la jornada de ayer, el juez José María Serrano Alonso, titular del Juzgado de lo Penal Número 1 de Oviedo, considera probado que Carrera, edil de Deportes en aquel momento, "en connivencia" con Esther Bustillo, concejala de Contratación, fraccionó la obra mediante dos contratos por importe inferior a 50.000 euros para que de este modo fuera adjudicada a un empresario local sin dar lugar a la presentación de una oferta pública que permitiera la participación de otros interesados.

El juez califica la resolución de "injusta" y "arbitraria" y tacha de "no creíbles" los argumentos dados por Emilio Carrera, según los cuales la obra se fraccionó para ser ejecutada "rápidamente", y buscó un técnico ajeno al Ayuntamiento porque los empleados municipales tenían "excesivo trabajo".

El magistrado explica en la sentencia que ambos exconcejales llevaron a cabo esa maniobra "a sabiendas de que actuaban sin respetar la legalidad". Esther Bustillo adjudicó como contrato menor, el 8 de febrero de 2013, la obra de adecuación del vestuario en 41.589,38 euros (IVA incluido). Cuatro días más tarde adjudicó, también como contrato menor, la renovación de la cubierta del edificio y otros trabajos en 31.057,65 (IVA incluido).

Emilio Carrera tiene otras causas pendientes con la justicia por su labor como representante público. Ayer, declinó hacer valoración alguna sobre la sentencia.