El colectivo "Gastronomía de la Amistad", de Oviedo, que agrupa a gentes de distintos lugares de la región, bajo la coordinación del ponderado Gustavo G. Izquierdo, continua su buena costumbre de organizar excursiones por el Principado para visitar concejos y pueblos. Estos días atrás la visita se giró a Arenas de Cabrales, villa en la que habitan 900 habitantes.
Llama la atención el excelente estado de todos sus edificios. Una vez aquí, podemos decir que es obligado visitar el museo de la Cueva del Queso de Cabrales, aparte de otros lugares de la zona. Allí te enseñan cómo se hace el queso y su historia.
Un detalle muy curioso y que se agradece es que al finalizar la visita se nos ofrecen una serie de diapositivas en las que te dan a conocer la vida de los laboriosos pastores. Las guías -muy amables, por cierto- le dan a probar al turista varios tipos de queso cabrales acompañados de unos culines de sidra. En definitiva, una visita muy didáctica y recomendable.
Al regreso, llegada la hora de la verdad, estaban reservadas las mesas para comer en la prestigiosa e histórica firma del hotel restaurante Casas Morán, en Benia de Onís, donde allí Rosi, alma y vida del negocio, con sus amables y dinámicos colaboradores, dejaron una vez más el prestigio de dicho establecimiento en lo más alto que pueden puntuar los gastrónomos.
En resumen, comida de calidad y excelente atención al cliente, en un establecimiento, por otra parte, sumamente acogedor dentro del propio hotel.
