Elena CASERO

Salmorejo cordobés, coquinas a la sanluqueña, tomate con melva, jamón, gran variedad de tortillas y choco frito fueron algunas de las delicias gastronómicas elaboradas por la bodega «La Andaluza», que pudieron disfrutar los numerosos asistentes al encendido del alumbrado de la segunda edición de la «Feria de Abril» en la ciudad, organizada un año más por la peña flamenca «Enrique Morente». La antigua plaza del pescado en Trascorrales se convirtió en una auténtica carpa sevillana con más de tres mil farolillos y un tablao flamenco en el que un grupo de bailarinas de las academias Baidán, Ritmo y Sonia amenizaron la velada a los asistentes con su arte y su salero.

El acto de inauguración comenzó con un baile en plena calle, presidido por el concejal de Cultura del Ayuntamiento, José Suárez Arias-Cachero, quien una vez finalizada esta demostración de baile, con un espontáneo incluido, accionó el interruptor con el que se daba por comenzada la feria. El presidente de la peña organizadora, Guillermo Pérez de Castro, afirmó que el principal motivo de esta celebración es «incorporarnos al panorama musical de la ciudad, ya que en este aspecto nos encontrábamos un poco retrasados con relación a otros estilos como la zarzuela».

La idea de la celebración surgió, en palabras de Pérez de Castro, «tomando algo con miembros de la peña el pasado año; pensamos en hacerla, a ver qué pasaba, y la verdad es que el tema se nos desbordó». Para esta segunda edición, la organización ha incorporado diferentes novedades como una fiesta infantil el domingo, día 29, día de la clausura de la feria, y un espectáculo de magia para adultos el sábado por la tarde. La jornada inaugural contó con la actuación, a las doce de la noche, de la bailaora malagueña Mónica Núñez, y del Ballet «Candilejas». A la una y media de la madrugada, las luces se apagaron... hasta mañana.