M. P.

Entre las muchas tradiciones de esta ciudad, el Ayuntamiento y el Arzobispado comparten dos rituales desde hace años: el caldo de Ramos y las fresas de Corpus. Son dos convites anuales en los que se reúnen el cabildo de la Catedral y la Corporación municipal.

Ayer tocaron fresas e invitó el Ayuntamiento. En Ramos, la Iglesia invitó a la Corporación a un caldo. No sólo varió el menú entre uno y otro eventos. También cambiaron los invitados y la ubicación. Por ejemplo, el caldo de Ramos estuvo un poco «soso», sin la presencia del Alcalde. Hacía sólo unas semanas que había perdido frente a Álvaro Cuesta las elecciones generales en Asturias. Ayer sí estuvo De Lorenzo, que presidió la mesa junto al arzobispo Carlos Osoro. La comida se celebró en el salón de plenos, porque Trascorrales alberga la exposición «Oviedo XII siglos».