Gonzalo M. PEÓN

El alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, anunció ayer el inicio de una nueva etapa de «máxima austeridad» ante la crisis económica que comienza a sufrir el país. Esta austeridad no será retórica y se centrará, sobre todo, en los concejales y en los trabajadores municipales. De Lorenzo avanzó que en los próximos días firmará un decreto de Alcaldía por el que todos los viajes de concejales o funcionarios deberán ser aprobados por él mismo. Si durante su reciente campaña como candidato del PP al Congreso de los Diputados aseguró que gestionaría el Ayuntamiento por el móvil, ahora el Alcalde les dice a sus concejales que solucionen los problemas por teléfono o por internet.

Ésta es la segunda ocasión en sus 17 años en la Alcaldía que Gabino de Lorenzo anuncia un período de la máxima austeridad. En la primera ocasión, en 2002, tras una sentencia del Tribunal Supremo que obligaba al Ayuntamiento a reinvertir en suelo público los ingresos por enajenación de patrimonio, llegó a recortar a la mitad durante un año las subvenciones a las asociaciones culturales, incluida la ópera.

Tras aquellos recortes, el Alcalde llevaba un par de años asegurando que el período de apretarse el cinturón había acabado y que el Ayuntamiento había recuperado sus arcas tras las fuertes inversiones de los planes de choque y la construcción del campo de fútbol.

Ahora vuelve a anunciar austeridad, aunque justificada en la crisis económica nacional e internacional. En esta ocasión, los recortes se centrarán en el propio Ayuntamiento. «Viene una situación económica muy difícil, que va a afectar gravemente a la inmensa mayoría de las familias. No es ni moral ni políticamente aceptable que el Ayuntamiento consuma recursos cuando las familias por efecto de la inflación y del desempleo están comenzando a sufrir dificultades que en el futuro inmediato, lamentablemente, van a irse agravando», explicó en unas declaraciones por escrito a LA NUEVA ESPAÑA.

De Lorenzo cree que «Oviedo será uno de los municipios menos afectados por la crisis, porque el plan municipal de vivienda ha puesto el acento en el suelo para vivienda protegida, que es la que mejor está resistiendo la llamada "crisis del ladrillo"». Pese a ello dice que es necesario «anticiparse poniendo los medios para minimizar el impacto» de la crisis.

Resalta que «recientemente, cuando dije que me retiraba de la política regional y nacional para concentrarme en la gestión municipal, me refería precisamente a esto. Hubo quien no entendió mi decisión e incluso quien interpretó que me retiraba definitivamente de la labor municipal. Evidentemente, no es así». Siguiendo esa argumentación, De Lorenzo asegura que «hoy la mejor forma de defender los intereses de Oviedo es concentrar el esfuerzo en gestionar cada euro del presupuesto con la máxima austeridad, con la máxima eficiencia».

Así mantiene que «los gobiernos de España y de Asturias bastante van a tener con atender a sus propios problemas como para atender a los de los ayuntamientos. No podemos esperar la ayuda de nadie».

Gabino de Lorenzo asegura que «dejar la política regional y nacional a un lado es una forma de hacer política. Concentrarme en la gestión, en el día a día municipal, es una forma de hacer política. La que corresponde a las circunstancias actuales». E insiste en que «en este marco es en el que hay que interpretar mi jubilación, que tiene un sentido claro: ahorrarle al Ayuntamiento unos miles de euros al año. Quien lo haya interpretado de otra manera se ha equivocado».

El Alcalde reconoce que el dinero de su sueldo no será la panacea económica del Ayuntamiento, aunque afirma que son «unos miles de euros, que no son ni muchos ni pocos, son algo más importante: son la prueba inequívoca de hasta qué punto "hilamos fino" en la gestión de la economía municipal en Oviedo. Así con todo».

Y en este «todo» anuncia que va «a promulgar de inmediato un decreto de Alcaldía por el que yo personalmente deberé autorizar cualquier viaje de cualquier concejal o funcionario que se realice con cargo al presupuesto».

Justifica esta medida en que «la mayor parte de los asuntos puede resolverse telefónicamente o por internet y vamos a establecer por norma suprimir los desplazamientos y los costes que acarrean. Es otra forma de reducir gastos y continuar con la política de austeridad que debe alcanzar al conjunto de la actividad municipal».

Gabino de Lorenzo tomó juramento ayer a los nuevos técnicos medios de gestión del Ayuntamiento de Oviedo que han conseguido su plaza en una oposición de promoción interna. Los nuevos técnicos del Ayuntamiento ovetense son, de acuerdo con el orden en el que aparecen en la fotografía superior, junto al Alcalde -a la izquierda-, Susana Álvarez Cachero, Margarita Noval Noval, Longinos Fernández Fernández, Eugenio Corpas Olmos, María del Mar Alonso Menéndez y Antonio Martín Muñiz.