La iglesia parroquial de Santo Domingo se quedó pequeña ayer por la tarde en la despedida al sacerdote Ramón Menéndez, padre dominico fallecido el pasado miércoles, día 28, a los 81 años de edad.

Numerosos fieles acudieron a dar su últimos adiós a un hombre que había residido en el convento de los Dominicos de la ciudad los últimos 33 años de su vida, dedicándose fundamentalmente a la predicación y al ministerio sacerdotal en sus múltiples facetas: director de catequesis de adultos, director de las cofradías del Rosario y del Nazareno, miembro de la comisión diocesana pastoral, consejero espiritual y consiliario diocesano de Acción Católica.