Gonzalo BENGOA

El Ayuntamiento de Ribera de Arriba ha llegado a un acuerdo con la Consejería de Bienestar Social para construir, en la capital del concejo, un centro rural polivalente de recursos para las personas mayores del concejo. Lo anunció el alcalde, José Ramón García Saiz, durante el Pleno municipal celebrado el pasado jueves. La inversión de este proyecto es de 2,4 millones de euros y tendrá el apoyo económico de los fondos mineros. Su apertura se prevé para el año 2010, iniciándose los trabajos de construcción a finales de este año. «Se trata de un nuevo modelo de centro para mayores que quiere impulsar la Consejería de Bienestar Social», señaló el regidor.

El edificio se construirá en una parcela municipal de 1.528 metros cuadrados de Soto de Ribera, donde actualmente se ubica el centro para la tercera edad, un inmueble de escaso valor arquitectónico que, sin embargo, «constituye un valioso referente para la vida pública y cultural del concejo», según García Saiz. El edificio incluye una residencia de diez habitaciones, un centro de día y un centro social. Los servicios se distribuirán en tres plantas, con una distribución que tendrá dos accesos independientes que permitirán el acceso directo al centro de día y al centro social, «lo que facilitará su buen funcionamiento». «Se tendrá una percepción agradable por parte de los usuarios, evitando la rigidez de los espacios clínicos convencionales», afirma el Alcalde.

En la planta principal, con acceso desde la nueva calle que tendrá que ser urbanizada, acoge los usos del centro social. Tendrá una sala de televisión, con juegos de mesas, lectura de prensa, área de comedor y cafetería. En esta planta se ubicará también el salón de actos para capacidad para 250 personas, además de los aseos incluyendo los específicos para personas con discapacidad.

En el sótano, con acceso peatonal a través de un vestíbulo, se desarrollarán los espacios del centro del día junto a las áreas técnicas como la cocina, lavandería y almacenes. En la zona asistencial se ubicarán los espacios destinados a la rehabilitación, reposo y consulta médica.

La primera planta del centro se destinará a la residencia con diez amplias habitaciones que tendrán una superficie de dieciocho metros cuadrados, que podrán ser utilizadas por una o dos personas, indistintamente. Por cada dos habitaciones habrá un baño completo apto para personas con discapacidad y en la zona común se instalará un baño geriátrico. En la parte central de la planta se ubicará la zona de reposo, con sillones y mesas para comer. El Alcalde reconoce que ahora los equipamientos para mayores en Soto de Ribera «son muy limitados».