J. N.

La Hermandad de Los Estudiantes no para. La clave está en la parroquia de San Javier de la Tenderina y muy especialmente en el párroco Alberto Reigada.

De ahí saldrá la procesión con el Santísimo Cristo de la Misericordia el Domingo de Ramos, siempre a costal. Es la única cofradía de la mitad norte de España que sigue este procediendo, quizás el más duro y sin duda el más vistoso. Subirán la cuesta de la Vega -una cita que se ha hecho tradicional en sólo tres años-, pasaran bajo el arco del Tránsito de Santa Bárbara de rodillas y en la plaza de Feijoo tendrán el encuentro con la Virgen de la Cofradía del Silencio.

Este año, además, van a sacar otra procesión desde la Universidad, en la noche del Jueves al Viernes Santo. Desde la Tenderina subirán el paso tres días antes y lo bajarán tres días después también en procesión pero en andas.

Entre los preparativos destaca la visita que han realizado a Sevilla hace apenas una semana. Adolfo Fiancés, considerado el druida de los inciensos, ha preparado para Los Estudiantes un compuesto formado por romero, naranja, mirra, incienso y vainilla, que será el olor de Oviedo en la Semana Santa.