David ORIHUELA

La polémica surgida con los inquilinos de las viviendas con alquiler protegido por el Principado en La Corredoria, que se quejan del coste final de los pisos, ha llevado a la Consejería de Vivienda a modificar su política de subvenciones para próximas convocatorias. Los solicitantes que accedan a uno de estos pisos, en los que el Principado marca el precio máximo de la renta, podrán pedir las ayudas al alquiler, tanto la renta básica de emancipación para jóvenes de entre 22 y 30 años -210 euros al mes durante cuatro años-, como las ayudas de la Consejería, que no tienen límite de edad y en las que la administración abona entre el 40 y el 70 por ciento del precio del alquiler. Hasta el momento no se contemplaba la posibilidad de acceso a estas subvenciones para los adjudicatarios de viviendas con alquiler protegido.

De este modo, las rentas podrían reducirse de los 370 euros actuales a 160 euros. Además, los inquilinos que hayan abandonado los pisos de La Corredoria porque no pueden hacer frente a los pagos, o que han sido desahuciados por no abonar los recibos, podrán solicitar una de las 460 viviendas de promoción pública de Prado de La Vega. Se retira así la norma de que tras rechazar una de las viviendas de La Corredoria los beneficiarios no podrían optar a otro tipo de ayuda durante cinco años. En Prado de La Vega, donde está abierto el plazo para solicitar 114 viviendas, los alquileres no superan el 20 por ciento del sueldo del beneficiario.

En La Corredoria hay 383 pisos con la fórmula denominada alquiler en derecho de superficie. La falta de pago por parte de algunos inquilinos provocó que se generasen numerosos procedimientos de desahucio.

En esta misma línea de ayuda al acceso a la vivienda se acaban de adjudicar 257 pisos en los barrios de Las Campas y Villafría. Los adjudicatarios están en proceso de formalizar el contrato de arrendamiento y aún están a tiempo de solicitar las ayudas al alquiler, siempre que la renta supere el 20 por ciento de su salario mensual.

En cuanto a las protestas de los vecinos por lo elevado de las facturas de los servicio de agua y de luz, la Consejería de Vivienda instó ayer a los inquilinos a presentar sus quejas ante la Administración para así poder buscar una solución.

Los pisos de la calle José Uría de La Corredoria, los dos bloques que se ven a derecha e izquierda de la imagen superior, están catalogadas por el Principado como de viviendas de alquiler en derecho de superficie. El procedimiento es que una empresa privada construye los edificios en suelo destinado a vivienda protegida. El Principado adjudica los pisos a los beneficiarios y marca el precio del alquiler.