L. S. NAVEROS

La empresa Jovellanos XXI ha reanudado las obras del Palacio de Congresos de Buenavista, que estaban prácticamente paralizadas hasta hace escasas fechas. En la actualidad, unas 140 personas trabajan en el complejo diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava. Las obras se centran en la sala principal del auditorio, en las salas modulares con las que contará el centro de convenciones, y en la urbanización exterior, con el recubrimiento con plaquetas de piedra de las bajantes que en el diseño inicial estaban previstas para albergar una lámina de agua.

Próximamente, la empresa comenzará a montar el dispositivo que permitirá elevar la visera móvil, un elemento que ha supuesto una considerable inversión, y para el que con mucha probabilidad tendrán que solicitar una licencia específica al Ayuntamiento.

Lo que sí se presentará en unos días con toda seguridad será una petición de prórroga, para fijar una nueva fecha de finalización de los trabajos. Según las fuentes consultadas por este periódico, se pedirá una ampliación del plazo de entre 10 y 12 meses. La fecha más temprana para la apertura del palacio será, si se cumplen estas estimaciones, febrero del año que viene. La última previsión de apertura aprobada por el Ayuntamiento era del 15 de junio de este año, con un año de retraso sobre las previsiones aprobadas inicialmente.

La construcción del Palacio de Congresos se ha visto seriamente afectada por la situación económica del país. Se trata de una obra diseñada para tiempos de bonanza, con el perfeccionismo en los acabados que caracteriza a los proyectos firmados por Santiago Calatrava. La fase actual, además, es especialmente costosa, ya que incluye el dispositivo para mover la visera, y todo el equipamiento interior.

Para relanzar el proyecto, Jovellanos XXI ha pedido al Ayuntamiento autorización para hipotecar la concesión del Palacio de Congresos, que es de propiedad municipal pero cuya gestión está cedida a la empresa durante 50 años. El Ayuntamiento dio el visto bueno a esta solicitud, que ha permitido a la empresa obtener la financiación necesaria para finalizar la obra.

El complejo de Calatrava en Buenavista se construyó en una parcela municipal, la que ocupaba el antiguo Carlos Tartiere, que se cedió a la empresa en un concurso que incluyó también la parcela del Vasco, donde se preveía construir un Palacio de las Artes, también con diseño de Calatrava. Tras numerosas vicisitudes, sólo ha quedado en pie la obra de Buenavista, donde ya están terminados y en uso el centro comercial, el aparcamiento subterráneo y las dos alas para oficinas del Principado. Quedan pendientes el hotel y el Palacio.

La comunidad del edificio número 9 de la calle Guillermo Estrada ha decidido acometer obras de mejora en su fachada, sin esperar a que prospere el proyecto de remozar estética y funcionalmente las torres que rodean al Calatrava, una iniciativa que continúa impulsando la Asociación de Vecinos de El Cristo-Buenavista. «Son obras de sustitución de plaquetas y de mejoras de urgencia, no implican en absoluto que no sigamos impulsando el proyecto de colocar fachadas ventiladas en 22 edificios del entorno del Calatrava», señala Ramón del Fresno, presidente de la asociación de vecinos. Del Fresno se muestra optimista sobre esta operación, para la que se pretende pedir una subvención de la UE. En la imagen, el edificio en obras.