Pablo GALLEGO

A partir del próximo curso, los estudiantes que quieran ser Ingenieros de Minas podrán elegir, sólo en Asturias, entre dos carreras distintas. Dos grados, uno en Oviedo y otro en Mieres, herederos de las anteriores titulaciones -superior y técnica- y de sus problemas para entenderse. La última polémica, desatada por el secretario general del Instituto de Ingenieros Técnicos de España, Juan Manzanares -que tachó el nuevo grado de Minas en Oviedo de «engaño para los estudiantes y sus familias»- tuvo ayer respuesta desde el lado de los ingenieros superiores. Según el decano del Colegio de Ingenieros de Minas del Noroeste de España, Ángel Fernández, las declaraciones del representante de los técnicos son «inadmisibles» y buscan «confundir a la opinión pública».

Ayer, la Escuela de Minas de Oviedo convocó a la plana mayor de la profesión para negar, punto por punto, las opiniones vertidas por Manzanares en su última visita al campus de Barredo. Con la legislación en la mano - los reales decretos y las órdenes ministeriales que regulan los diferentes aspectos de la adaptación al nuevo Espacio Europeo de Educación Superior (EEES)-, Fernández y el director de la Escuela de Minas de Oviedo, Mario Menéndez, desmontaron las teorías de Manzanares.

Primero, defendieron que los estudiantes de Oviedo -en el grado en Ingeniería de Tecnologías Mineras- tendrán «mejores opciones de encontrar trabajo», al disponer de un perfil profesional «de mayor amplitud y versatilidad» que les prepara para «un gran abanico de posibilidades laborales». El grado heredero de la ingeniería superior, de carácter generalista, contra la especialización típica de las ingenierías técnicas, en este caso, el título en Recursos Mineros y Energéticos que ofrecerá el centro de Mieres.

Después, negaron que el único futuro para el grado de Tecnologías Mineras sea «acceder al máster de Ingeniero de Minas», y destacaron que, al cursar esa formación de posgrado, se alcanzarán «todas las atribuciones profesionales de las distintas tecnologías específicas», no sólo las asociadas al grado que se impartirá en Mieres.

Pero, ¿cuál es la forma de obtener el título oficial de Ingeniero de Minas? La respuesta está en el máster que impartirá el centro de Oviedo. Una vez que los estudios del llamado «plan Bolonia» se instalen por completo, máster aparte, los titulados en Oviedo o Mieres serán graduados. En Tecnologías Mineras o en Recursos Mineros y Energéticos.

Los ingenieros superiores reunidos ayer apuntaron además que las declaraciones de Manzanares estaban «intencionalmente sesgadas». Ante una comunidad universitaria menguante, y según el presidente del Instituto de la Ingeniería de España, Manuel Acero, uno de los objetivos sería «atraer alumnos» mediante el «desprestigio» de la Escuela de Minas de Oviedo. Un centro cuyos estudiantes invertirían «un año» en cursar el máster, al contar con una formación «más profunda y versátil». Los titulados en Mieres se enfrentarían, según él, a un máster «de un año y medio o dos años», al tener que cursar «complementos» si no quieren encontrarse con «un muro». El secretario del Colegio de Ingenieros de Minas del Noroeste, Vicente de la Pedraja, utilizó un símil futbolístico al señalar que a la Escuela de Oviedo se viene a «sudar la camiseta».

El director de la Escuela confió en que el primer curso de nuevo grado supere los cuarenta alumnos. Más o menos, la cifra de estudiantes que, hasta este año, accedían a la ingeniería superior de Minas en Oviedo. «Además, nuestro primer curso servirá para cursar después cualquier ingeniería, porque el primer año será idéntico», apuntó. Ventajas de Bolonia.