Pablo GALLEGO

Este verano, la programación cultural de Oviedo puede resumirse en una sola palabra: zarzuela. La antología lírica preparada por el Ayuntamiento de Oviedo se ha comido el resto de la programación de la concejalía de Cultura, más allá de conciertos puntuales o cesiones del teatro Filarmónica a distintas asociaciones durante el mes de julio.

La razón para que las diez funciones del espectáculo «¡Viva la zarzuela!» sean casi la única opción cultural para quienes pasan el verano en Oviedo parece ser el presupuesto. Entre cantantes, actores, directores, escenografía y demás aspectos del entramado artístico, el gasto llegó a rozar los 900.000 euros. En este momento, el presupuesto oficial suma 808.750 euros, después de que se anulase una ampliación de 84.130 euros -previamente aprobada- que lo hacía ascender hasta los 892.880 euros.

En época de recortes públicos, esta cifra es «demasiado alta para pensar en hacer ninguna otra cosa», afirman fuentes de Cultura. Con una excepción: el ciclo de cine «H-H» -humor hispano-, que ocupará el teatro Filarmónica durante los lunes del mes de julio con películas de Ozores o Mercero.

Las mismas fuentes añaden que «los problemas de presupuesto que pueda tener la concejalía para afrontar otras de sus responsabilidades a partir de ahora surgen a raíz del gasto de este montaje». En comparación con el espectáculo de zarzuela -10 funciones repartidas en fines de semana de julio y agosto-, todo el ciclo de la última temporada de conciertos sinfónicos y jornadas de piano de Auditorio, dependiente de la misma concejalía, sumó 1,3 millones de euros. Con más de veinte conciertos con orquestas y solistas internacionales, el gasto de esta programación anual superó al de la zarzuela en poco más de 400.000 euros.

El Ayuntamiento defiende que esta programación busca un perfil de espectadores determinado: de nivel cultural alto, que gasta dinero en la ciudad y aporta un «valor añadido» a las funciones. Pero desde la oposición municipal se reclama que el Consistorio tenga en cuenta «la diversidad» de la ciudad. Según el portavoz de Ciudadanos por la Izquierda, Roberto Sánchez Ramos, «el Alcalde -Gabino de Lorenzo- programa lo que a él le gusta, y pone a presentarlo a quien quiere», en referencia al actor Arturo Fernández, que cobrará 104.400 euros por su participación. Un 12,9 por ciento del presupuesto total del espectáculo.

«Oviedo tiene en verano una oportunidad extraordinaria para trasladar al exterior su identidad de ciudad abierta y relacionada con diferentes actividades culturales», defiende Manuel Ángel Rodríguez, concejal del Grupo Municipal Socialista. «Desgraciadamente», continúa, «a todo el empuje de la ciudadanía no se suma la apertura de miras de quienes tienen la responsabilidad de programar una actividad cultural para todos».