«Cuando empecé a estudiar la carrera universitaria era capaz de definir qué era un gen en apenas dos o tres minutos, ahora no sé ni cuando podré explicarlo». El catedrático de Bioquímica en la Universidad de Valencia Luis Franco Vera comenzó ayer así, con uno de los mayores dilemas de la ciencia actual, su conferencia «De genes, genomas y epigenomas», en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA.

La charla, organizada en colaboración con la Facultad de Química y la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, logró abarrotar el salón de actos gracias a un discurso sencillo pero científico que reunió a expertos en genética, estudiantes y gente de a pie.

Con el apoyo de una proyección, Franco Vera explicó los principales hallazgos que a lo largo de la historia han permitido conocer «los principales secretos de la transmisión hereditaria». Según el bioquímico, «todavía nadie puede definir con exactitud meridiana qué es un gen, pero podemos aproximarnos».

Gregor Mendel fue el primer nombre de la conferencia, al tratarse del autor de las llamadas leyes de Mendel, que rigen la herencia genética. Este monje agustino y naturalista escribió a finales del siglo XIX un artículo en una revista local que, según Franco Vera, «pasó prácticamente inadvertido» y que esbozó los genes, a los que llamó «sustancias desconocidas». Mendel estaba más interesado en el desarrollo de las plantas o, lo que es lo mismo, en su hibridación, «por lo que su descubrimiento no fue reconsiderado hasta el año 1900, al inicio de las investigaciones genéticas», explicó el bioquímico. Durante la conferencia fueron inevitables las referencias al científico Wilhem Johansen, que acuñó por primera vez el término «gen»; a Theodor Boveri y Walter Sutton, autores de la teoría cromosómica de la herencia (ya que averiguaron que los genes están contenidos en los cromosomas) o a Thomas Hunt Morgan como fundador de la conocida como genética clásica.

Para Franco Vera, «uno de los momentos cumbre de la genética fue el descubrimiento del ADN (ácido desoxirribonucleico), ya que encierra los secretos de los genes humanos». Históricamente se considera que los investigadores Avery, McLeod y McCarty descubrieron que el ADN «es el portador de la información genética, y a partir de entonces se profundizó en su estudio». Sin embargo, para el bioquímico, no sería hasta 1953 cuando la composición del ADN se conoció. «El descubrimiento del ADN fue un artículo de 900 palabras que se llevó el Nobel», en clara referencia al texto que los científicos Crick y Watson escribieron en una página de la revista «Nature» sobre la estructura en doble hélice del ADN. El conferenciante también destacó los últimos avances científicos, con especial hincapié en la epigenética, «una modificación que sin alterar los genes pone el énfasis en uno en particular, de la misma manera que se puede subrayar una frase».

Franco Vera ha publicado numerosos libros científicos, un centenar de artículos y ha dirigido catorce tesis doctorales.