La comunidad educativa del Colegio San Ignacio de Loyola, de los Jesuitas, se volcó ayer en la jornada familiar que cerró su semana de la solidaridad. Con el objetivo de recaudar fondos para dos proyectos solidarios que apadrina el colegio, los alumnos organizaron un rastrillo, lavaron coches en un aparcamiento cubierto, y los más mayores disfrutaron de un guateque que contó con música y hasta un «photo call» para que los chicos pudieran llevarse un recuerdo del evento. También los padres pudieron divertirse en un bingo solidario y una rifa. La recaudación servirá para sufragar proyectos educativos.