P. A.

La inauguración ayer en Oviedo del curso de actualización «Queratoplastias y terapias regenerativas de la córnea», que se celebra en el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, sirvió para que el rector de la Universidad asturiana, Vicente Gotor, recibiera de manos del profesor Luis Fernández-Vega la medalla de este Instituto «por ser un investigador con un bagaje extremadamente notable y con una aguda sensibilidad para todo lo que suponga innovar y perseguir la excelencia». El premio se entrega coincidiendo con el 125.º aniversario de la práctica oftalmológica de esta saga médica ovetense.

Vicente Gotor recibió la medalla «con honor y orgullo porque demuestra un reconocimiento a la colaboración que existe entre instituciones que velan por la investigación y, en definitiva, por mejorar la calidad de vida de la sociedad». El Instituto Fernández-Vega es, entre otras colaboraciones, socio de la Universidad de Oviedo en el Campus de Excelencia Internacional, especialmente vinculado al clúster de biomedicina y salud.

En su discurso, Luis Fernández-Vega señaló que hoy todo cuanto rodea a la oftalmología «es objeto de atención en nuestro Instituto, en el que la investigación tanto clínica como básica juegan un papel muy importante, pero sin olvidarnos de la docencia en todas sus facetas». Y añadió: «En todo ello, el papel de la Universidad de Oviedo ha sido siempre fundamental. Con ella hemos firmado un acuerdo marco y otros específicos que posibilitan la colaboración en proyectos de investigación y actividades docentes».

Fernández-Vega también señaló que la actividad clínica y quirúrgica de este Instituto «genera una alta capacidad docente de la que se pueden beneficiar los estudiantes de posgrado y se vehicula en programas máster de superficie ocular y córnea, retina, glaucoma, optometría clínica, enfermería oftalmológica y cursos de experto universitario, para estancias cortas entre nosotros».

Fernández-Vega dio la bienvenida a los asistentes al curso, que servirá para comprobar y discutir sobre la evolución de los trasplantes de córnea clásicos o penetrantes (en los que se sustituye la totalidad de la córnea) a los lamelares (donde sólo se reemplazan las capas dañadas de este tejido) y a las nuevas terapias avanzadas, que incluyen la celular, la ingeniería de tejidos y los tejidos sustancialmente manipulados. La queratoplastia lamelar mejora la agudeza visual del paciente y consigue una recuperación más rápida que la penetrante.