Las campanas están doblando por «Movie Jack», y ya lo siento. Joven banda de glam'n'rock, devotos confesos de insignes bandas locales como «Babylon Chàt» y con un cantante, Pablo Herrero, que pretendía ser el sosias de Igor Paskual, la muerte que reclamaban para el indie en uno de sus últimos trabajos («Muerte al indie») les ha llegado a ellos antes de tiempo. «Movie Jack» se separan, lo dejan, se acaba. Su despedida se anuncia como un punto y aparte provocado por el cambio de residencia del cantante, pero quieren bajar el telón por todo lo alto. Por eso darán pública sepultura a su propio proyecto sobre las tablas del Nunca Jamás, en la plaza del Paraguas, el sábado, a las 21.30 horas (4 euros). Y un poco a la manera en que Zorrilla -perdón por la cita, pero la cosa va de románticos- se dio notoriedad en el funeral de Larra, aquí al adiós de «Movie Jack» acuden desde Gijón los «Destino 48», jovencísimas rock stars con vocación omnívora (de comérselo todo) que acaban de comprar todas las papeletas para quedarse con el trono, si lo hubiera, de los «Movie Jack». La rifa, por cierto, creo que será el 9 de noviembre, cuando abran para Leiva en el Niemeyer.
