Ángel FIDALGO
Con desparpajo y sin complejos. El desfile de moda infantil organizado ayer por la junta provincial de Asturias de la Asociación Española Contra el Cáncer reunió a unas cuatrocientas personas en el hotel de la Reconquista previo pago de cinco euros por la entrada. Diez minutos antes del desfile el recinto ya estaba prácticamente lleno para colaborar con esta causa.
Una treintena de niños de Oviedo, Mieres y Turón, con edades comprendidas entre 1 y 8 años, desfilaron por la pasarela que se colocó en el salón Covadonga para mostrar las últimas creaciones de Petite Amèlie. Los más pequeños desfilaron con la soltura y la simpatía propias de la edad. Además, también participaron en la causa tres modelos profesionales luciendo prendas para los mayores. Todos ellos cruzaron la pasarela con prendas inspiradas en los colores otoñales y en los modelos que año tras año lucen los asistentes a las carreras de caballos que se celebran en el hipódromo inglés de Ascot.
La organizadora de este evento, la mierense María Dolores Olavarrieta, destacó «la solidaridad de las muchas personas que nos acompañan año tras año», al tiempo que advertía que éste es el primer desfile que organizan con moda infantil «que también es el más alegre». Las prendas solidarias se pueden adquirir en la página de internet de la firma de moda.
El desfile lo abrió el modelo más pequeño, Gonzalo Gulias Fernández, de tan sólo quince meses, y al que su madre, Laura Fernández Méndez, llevó de la mano por la pasarela mientras el público rompía en aplausos. Lo mismo ocurrió cuando salió el otro modelo más pequeño, Alejandro Fernández Sancho, de 2 años. La mayoría de los participantes rondaba los cuatro años.
Laura del Valle, que destacó su condición de abuela y con una hija que afortunadamente superó el cáncer, estaba ayer emocionada. «Da gusto estar aquí, entre tantas personas que hacen piña para luchar contra esta enfermedad. Rara es la familia que no la padece».
