El pato y el pavo «conflictivos» enjaulados detrás de la Casona de la Montaña en el Parque de Invierno hacen ya su vida por separado. El servicio de Parques y Jardines decidió sacar al pato de allí después de que la Policía Local recibiese numerosas llamadas de ciudadanos alertando de que el malvado pavo estaba desplumando al pato, picotazo a picotazo. Tal y como adelantó este periódico, los animales permanecían allí aislados por rebeldes. No habían conseguido adaptarse a la convivencia con sus semejantes en el Campo San Francisco. El Ayuntamiento intentará ahora que el pavo se quede a vivir fuera de la jaula en el Parque de Invierno con una pava y sus crías.