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La basílica de San Salvador regula las visitas

La decisión de cobrar entrada para visitar la Catedral causa división entre los fieles

Los detractores consideran "extraño" pagar por ver una iglesia y los partidarios creen que "merece la pena"

La decisión de cobrar entrada para visitar la Catedral causa división entre los fieles

A las puertas de la Catedral, a la salida de la misa dominical, los feligreses y algunos visitantes manifestaron ayer opiniones dispares sobre la decisión del Arzobispado y el cabildo de cobrar entrada a los turistas, a partir de abril y al precio de siete euros el tique individual, como adelantó LA NUEVA ESPAÑA el sábado. Los detractores del pago por visita consideran "extraño" pagar por entrar en una iglesia y no entienden por qué, si siempre ha sido gratis, ahora se pretende cobrar. Hay otra parte que considera que pagar es "habitual", que la mayoría de las catedrales y los monumentos con cierto interés cobran por la visita y que en el caso de la catedral de Oviedo "merece la pena" hacerlo.

El ovetense Alberto Secades, acompañado por su familia a la salida de la misa dominical de la Catedral, entiende que el cobro de entrada es "una práctica habitual". Cuenta que acaba de llegar de Roma y Florencia y allí no hay monumento que no exija el pago a las visitas. "Yo pagué en la exposición de la Sábana Santa que se montó este verano, y eran todo copias y facsímiles", señala, y el precio, añade, era bastante más elevado al que quiere aplicar la Catedral. En el interior del templo ovetense "hay un montón de reliquias y el Museo de la Iglesia es maravilloso, el claustro es precioso, la sala capitular también". De hecho, considera que pagar siete euros por ver todo eso no es excesivo, "merece la pena". "Oviedo debería ser uno de los grandes centros de peregrinación", opina. Amparo Camblor comparte esa opinión. "No es extraño que cobren a las visitas. En todos los sitios cobran, ¿por qué no iban a hacerlo también en la catedral de Oviedo?", planteaba ayer mientras buscaba por el pórtico de la Catedral el horario de las misas.

Joaquín Martínez, de visita desde el occidente asturiano, se niega a pagar en las iglesias. "Estuve en Segovia, cobraban y no entré", dice. En su caso, es una cuestión "de principios". "Todos estamos pagando impuestos y considero que la Catedral es un sitio público, así que si me cobran no entro", afirma.

Tampoco están de acuerdo Christian Martínez y Alberto Martínez, ambos muy jóvenes y vecinos de Oviedo. El primero comenta que le "parece extraño", "está mal, y más siendo un punto turístico de Oviedo". Además, considera que el precio que se baraja "es excesivo". Su amigo incide en la misma idea. "Me parece muy mal, porque es un lugar de interés turístico que siempre ha sido gratis. Ya nos cobran por la Cámara Santa", manifiesta y plantea la duda de cómo se regulará el acceso de quienes acudan a la celebración de las misas. Raquel Vargas, que acude a misa semanalmente a la Catedral, tuerce el gesto ante la pregunta sobre el pago de entrada: "¿Cómo? Para entrar en una iglesia no has de pagar. Así ya nadie va a venir a misa en Oviedo".

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