"¡Qué empiece la música!", gritó Manuel Noval dando paso a sus compañeros de equipo, "Los Descafeinados", en el I Campeonato de Baristas Down de Asturias, celebrado ayer en el hotel de la Reconquista. Quince chavales con síndrome de Down compitieron por preparar el mejor café y, de paso, demostraron que son competentes para desempeñar un trabajo. La Asociación de Síndrome de Down de Asturias está formada por 161 familias y, según su presidenta, Inés Fernández, "sólo once chavales están trabajando".

Algunos de los quince muchachos que participaron en el concurso de ayer realizarán próximamente prácticas en hoteles. Tatiana Sánchez, de 27 años, es uno de ellos y se muere de ganas de empezar. Además, cuenta que le gusta mucho atender a la gente.

Víctor Couto y Adrián Fernández ejercieron de jueces del concurso, organizado por la empresa Cafento. Ambos acumulan premios, tanto nacionales como regionales, como baristas. Couto ofreció, además, una exhibición con otro compañero de profesión, Diego López. Durante los últimos días estuvieron impartiendo un curso a los chavales participantes en el certamen, que antes se había celebrado en Valencia, Córdoba y Santiago de Compostela. Los jóvenes pusieron gracia y desparpajo en la preparación, la presentación y el manejo de la bandeja y, finalmente, los tres equipos participantes resultaron ganadores, uno en cada categoría: expresos, capuchinos y combinados de café.