El domingo día 8 de junio leo con cierto estupor la noticia que encabeza este escrito y como antiguo trabajador de esta factoría, ahora cerrada, y encontrándome en situación de desempleo no puedo más que manifestar lo siguiente:

1. Me encuentro en un estado de perplejidad que sólo puedo expresar con las palabras de un diplomático otrora ministro en tiempos de vientos levantinos que decía "manda huevos" y lo manifestado por el señor arzobispo de esta diócesis "clama al cielo", ambas afirmaciones serían válidas para tan esperpéntico propósito.

2. Desde diversos estamentos se está tratando de trasladar a la opinión pública ovetense -y por ende a la asturiana- la necesidad de dar salida a unos terrenos que hace tiempo persiguen los mismos de siempre. Aún siguen siendo terrenos industriales sumidos en un estado de desertización como consecuencia de la inoperancia e incompetencia de los que deberían haber apostado por mantener el status de esta factoría.

3. Se está apelando a una asociación de "sabios" para que den ideas sobre la utilización de esos terrenos, cuando aún están calientes los despidos forzosos de 55 trabajadores, efectuados por una multinacional que contó con el beneplácito de todos (excepto de los trabajadores) para su desmantelamiento.

4. ¿Qué se pretende enseñar a la ciudadanía?, supongo que naves vacías fruto de la inoperancia política (sin distinción de ideologías o colores) porque si no es eso no sé qué más se puede enseñar de un centro fabril cerrado por la dejadez de quien tuvo y tiene responsabilidades para no haberlo ejecutado.

5. ¿Por qué no se hizo esto (puertas abiertas) antes de privatizarse en 2001 o antes de cerrar en 2012? De esta manera se podría haber mostrado a los ciudadanos la instalación moderna y funcional con la que contaban gracias a sus impuestos. Pero no, nada de eso, se llevó a cabo el desmantelamiento de la fábrica dejando herido de muerte el sector en Asturias. Ahora vamos conociendo que todo fue pura palabrería y que todo estaba pactado, alguien debería dar muchas explicaciones.

6. La factoría que pretende mostrarse o, mejor dicho, lo que queda de ella tuvo todas las homologaciones de fabricación a las que una empresa moderna aspira, y se fueron al garete. Da la impresión de que no interesaba ser proveedor, entre otros, de Rolls-Royce y de más marcas punteras en la fabricación de motores de aviación. Por lo visto era mejor cerrarla para después salir con la ocurrencia de la visita en la noche blanca.

Podría extenderme más, pero para qué. Todo lo que podría decir ya está dicho, escrito y recogido en las hemerotecas y nadie, absolutamente nadie de los que pudieron parar este desaguisado, movió un dedo. Por todo ello, termino como empecé: "Manda huevos" y "clama al cielo".