El Ayuntamiento de Oviedo puso ayer sobre la mesa los "condicionantes técnicos y administrativos" que van a limitar el desarrollo del conocido como bulevar de la "Y", el proyecto para mejorar la entrada a la ciudad por la zona de Santullano, que va a ser diseñado por los ovetenses a través de un proceso "histórico y pionero" de participación ciudadana. El ingeniero municipal, Ignacio Ruiz Latierro, fue el encargado de marcar las líneas rojas durante la presentación de los talleres organizados por la plataforma vecinal "Imagina un bulevar" en colaboración con el Consistorio, unos encuentros que se están desarrollando en el IES Pérez de Ayala de Ventanielles y de los que saldrán las propuestas populares que van a condicionar el pliego de condiciones para el concurso de ideas que se convocará para adjudicar el proyecto.

Lo primero que quiso dejar claro Latierro es que "ahora no se está debatiendo el futuro de la fábrica de La Vega", porque los terrenos "son propiedad del Ministerio de Defensa y administrativamente se nos escapan". Después se centró en algunos otros escollos que impiden el libre desarrollo del plan urbanístico. "Hay que tener en cuenta que frente a la iglesia de Santullano no se puede colocar cualquier cosa. El ámbito de protección definido por Cultura traspasa todo el ancho de la autopista y llega incluso hasta los terrenos de La Vega; cualquier solución que planteemos frente a la iglesia ha de ser extremadamente respetuosa".

Por otro lado, también habló de conflictos de competencias. "La autopista comienza a ser de titularidad municipal donde está situado el cartel de Oviedo, frente a Guillén Lafuerza. El tramo anterior es autonómico, por lo que cualquier iniciativa que se plantee en la parte inicial del ámbito de trabajo está sujeta a los condicionantes que nos imponga el Principado".