Agustín Iglesias Caunedo se puso ayer unas gafas futuristas sin cristales exteriores, con antena y de color blanco nuclear para contemplar la labor del que, posiblemente, se convierta en un nuevo nuevo miembro de la plantilla municipal del área de seguridad ciudadana. El Alcalde permaneció quieto en la explanada cubierta del palacio de congresos de Calatrava en torno a las diez y media de la mañana con la vista (o eso parecía) puesta en un dron. Es decir, que observó los movimientos de una pequeña aeronave no tripulada, pero sí teledirigida, a través de un monitor en forma de gafa, que mostraba las imágenes captadas por una cámara instalada en el propio vehículo aéreo. "Este será el primer dron matriculado en Oviedo, que inicialmente estará vinculado a labores de información, pero que a largo plazo será de mucha utilidad a la Policía Local, Bomberos y Protección Civil", sentenció Iglesias Caunedo, ya sin las gafas.

Los técnicos del Ayuntamiento estudian ahora a fondo la normativa que regula el uso de los drones -calificada por el Alcalde, como "muy estricta"- para poder utilizar el aparato conforme a la ley. Así, varios agentes de seguridad ciudadana reciben estos días formación sobre la legalidad vigente en el territorio español en materia de drones, y que establece, entre otras cosas, que es necesario tener una licencia de pilotaje para manejarlos.

Iglesias Caunedo explicó ayer que el municipio ha adquirido esta aeronave con vistas a revisar fachadas, edificios o calles, aunque en una primera fase de prueba hará una labor informativa sacando fotografías para distintas campañas de la ciudad.

Este dron cuesta aproximadamente unos 2.000 euros y forma parte del material práctico usado en el módulo multimedia de la Escuela Taller "Oviedo Creativo" que se imparte en el Centro de Formación Ocupacional de la Corredoria.

El monitor, Ramón Suárez, da clase a ocho jóvenes de entre 18 y 25 años interesados en el manejo de estas aeronaves. El profesor y sus alumnos -cuatro chicas y cuatro chicos- acudieron ayer a la presentación formal entre Iglesias Caunedo y el aspirante a agente de seguridad ciudadana.

"Los drones tienen muchísimos usos y van a marcar un antes y un después en el rescate de personas, por ejemplo, en la nieve o en un bosque", explicó el monitor del módulo multimedia, que también aclaró que los drones pueden manejarse de dos formas diferentes; de modo manual o por GPS.

Los técnicos del Ayuntamiento aún no han decidido qué tipo de técnica de pilotaje va a usarse con la aeronave ovetense hasta analizar los pros y los contras. "El manejo manual requiere muchísima destreza porque al más mínimo golpe de aire el aparato se descompensa y puede cambiar de rumbo, mientras que el GPS hace que el dron sea capaz de volver al punto de origen", aclaró Suárez.

El proceso de matriculación del vehículo aéreo no tripulado que ha comprado el Ayuntamiento todavía está en marcha. Una vez hecho, el dron sobrevolará Oviedo para grabar imágenes promocionales del municipio y comprobar su comportamiento en el aire.