Siete colegios de Oviedo, en concreto los de Ventanielles, Poeta Ángel González, Lorenzo Novo Mier, Fozaneldi, Veneranda Manzano, Santa María del Naranco y La Ería, abrirán finalmente sus comedores escolares durante el mes de julio para atender a los 686 alumnos que lo han solicitado.

Según ha informado en un comunicado la concejala socialista Marisa Ponga, responsable del área de atención a las personas en el equipo de gobierno, el régimen de utilización del comedor será el equivalente al período ordinario de apertura, con las adaptaciones necesarias en cuanto a horarios y el precio será de 3,54 euros por menú (81,42 para todo el mes).

El precio del comedor se corresponde con la cantidad contemplada en la Ordenanza Fiscal es decir, 3,54€ por menú que, aplicado al número de días de comedor resultaría en una cantidad de 81,42€ para todo el mes de julio.

Para poder facilitar el uso del comedor a las familias más necesitadas, se aplicó el procedimiento de concesión de ayudas económicas de emergencia social cuyo importe, en este caso, equivale al de una beca de comedor durante el curso escolar.

Así, con carácter general el usuario abona 8,14 euros ya que la beca cubre el 90 por ciento del coste del servicio con lo que el gasto que supone la concesión de estas ayudas económicas se estima en 25.400,14 euros que se financian con cargo al Presupuesto de Servicios Sociales, si bien la gestión de esta iniciativa se ha realizado en colaboración con la Concejalía de Educación.

Según la concejala, el equipo de gobierno consideró un objetivo prioritario ofrecer una solución a los problemas que puedan tener algunas familias de Oviedo para garantizar la alimentación de sus hijos y para conciliar la vida familiar y laboral en ese periodo.

Así, Ponga afirma que se estudió que fórmula sería más adecuada, procurando que las medidas a adoptar no supusieran una estigmatización de las personas beneficiarias dada la visibilidad que podía tener la utilización de un recurso de este tipo.

La solución que se consideró más adecuada fue ofertar a todas las familias la posibilidad de disfrutar del comedor escolar durante el mes de julio lo que permitía, según la edil del PSOE, conciliar la vida familiar y laboral y cubrir las necesidades de alimentación de algunas familias con dificultades económicas Este planteamiento permite, además, evitar las estigmatización de estas familias.

La prioridad, añade, era abrir los comedores que gestiona el Ayuntamiento de Oviedo dado que el contrato actual lo prevé si se alcanza una determinada ratio, lo que llevó al equipo de gobierno a reunirse con los directores de esos diecinueve centros y después con los responsables del resto (públicos y concertados) para estudiar cuantos podían sumarse a la iniciativa y qué demanda tenían.

Posteriormente la asignación de plazas de comedor partió de la premisa de que los usuarios reciban el servicio en su centro, salvo que no se pudiera abrir o no hubiera alumnos interesados, en cuyo caso se procuró ofertar el servicio en el comedor más próximo.