El Ayuntamiento de Ribera de Arriba aprobó en el Pleno municipal celebrado ayer la liquidación de las cuentas de 2014, con los votos del PSOE e IU a favor. A lo largo del debate previo, la oposición cuestionó los gastos en telefonía y comidas y las retribuciones de los concejales del equipo de gobierno. Los socialistas esgrimieron como un éxito de su gestión el remanente de 9,7 millones de euros; sin embargo la oposición, PP y Foro, atribuyó ese ahorro a la ausencia de inversiones que favorezcan la actividad económica y que generen empleo.

El concejal del PP, Pablo García, preguntó durante el pleno por el gasto de 2.207 euros en la compra de seis móviles de alta gama y la adjudicación de los servicios de telefonía. También quiso saber por el pago con la tarjeta bancaria del Alcalde de facturas de comidas por 543 euros. El representante de Foro, Borja Fernández, se interesó por varias comidas en Barcelona, Madrid y Tordesillas, durante desplazamientos de los que su grupo dice no tener constancia.

El PP también cuestionó los sueldos, retribuciones y complementos económicos de ciertos funcionarios y miembros del equipo de gobierno local. Además, denunció que algunos están realizando jornadas laborales por debajo de lo establecido.

García tildó de "trasnochada" la gestión del alcalde José Ramón García (PSOE), y le echó en cara que no aplique "acciones para paliar el alto porcentaje de desempleo de Ribera de Arriba, que continúa a la cabeza del paro en Asturias con una tasa del 36 por ciento". En esa misma línea se manifestó el edil de Foro, Borja Fernández, que es de la opinión de que "hay superávit porque no hay inversión". Este concejal considera injustificable que haya más de nueve millones de ahorro cuando, según hizo ver, el paro en el concejo alcanza a más de la tercera parte de la población y hay una caída demográfica constante desde hace tres años. El edil reclama "más inversión y apoyo a los autónomos". Una vez acabado el pleno, el PP hablaba de las "cacicadas" del Alcalde socialista y Foro anunciaba que estudiará emprender acciones legales por su negativa a responder a sus preguntas. Entre tanto, el Alcalde se quejaba de que a menudo las cuestiones que ambos partidos llevan a los Plenos municipales no entran en el ámbito del debate político.