Los vecinos de la localidad de Villaperi no pegan ojo desde el pasado fin de semana. Durante la madrugada del sábado al domingo los ladrones se cebaron con los vecinos del pueblo e intentaron entrar a robar en una docena de viviendas, destrozando las vallas de cierre de las fincas y forzando puertas y ventanas en la parte trasera de las casas, algunas con gente en su interior. Finalmente solo lograron acceder a dos inmuebles, de los que se llevaron diversos objetos de valor.

Los vecinos están muy asustados por las violentas formas de los cacos, que arrasaron con todo lo que encontraban a su paso. Los afectados por los daños presentaron denuncias ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que se han hecho cargo de la investigación.

Una de las pistas que siguen los investigadores de la Guardia Civil -cuya unidad de Policía Judicial se desplazó al lugar a recoger pruebas- es el testimonio de un vecino que regresaba a su casa en la zona en la madrugada en la que ocurrieron los hechos. Esta persona asegura haber visto corriendo por las fincas a tres hombres encapuchados. También reparó en que llevaban guantes. Otros vecinos han encontrado rodadas en zonas que no son transitadas habitualmente por vehículos de uso no agrícola.

"La gente está preocupada y se siente insegura, no había pasado nunca, pero la gente es mayor y tiene miedo. Estamos pidiendo más vigilancia para evitar que vuelva a ocurrir", indicaron ayer a este periódico vecinos afectados por los robos en Villaperi. "Nos da miedo el hecho de que les diese igual que hubiese gente en casa. Rompieron vallas, cortaron pastor y destrozaron de todo para conseguir su objetivo", aseguran los residentes.