Una dotación del cuerpo de Bomberos de Oviedo intervino ayer en la fachada de la Iglesia de San Isidoro el Real para retirar cascotes y elementos arquitectónicos de la fachada del templo ovetense, como se aprecia en la imagen de la derecha. Al mediodía, un equipo de tres profesionales empleó un camión grúa para proceder a la retirada de los cascotes que amenazaban con desprenderse de la fachada frontal del templo a causa de intensa la lluvia que cayó ayer sobre la ciudad. Efectivos del cuerpo informaron de que han actuado para evitar el peligro de desprendimiento tras recibir el aviso de la caída de una pequeña cantidad de cascotes en la Plaza de la Constitución, donde está situada la Iglesia de San Isidoro el Real, una zona de gran afluencia debido a la presencia de la oficina turística y a la cercanía de la Catedral y el mercado del Fontán.