"No la vi y tampoco podía verla desde mi posición", declaró ayer el camionero L. M. V. Á., acusado de arrollar a una mujer de 94 años en la confluencia de las calles Matemático Pedrayes y Cervantes, en la mañana del 25 de junio de 2013. A consecuencia de aquel atropello, la mujer, que no acudió ayer al juicio celebrado en el Juzgado de lo penal número 2 de Oviedo, perdió uno de sus brazos. El hombre aseguró que la mujer "se echó encima del camión", por lo que no pudo evitar materialmente el atropello. Su defensa, a cargo del letrado Enrique Liborio Rodríguez Paredes, pidió la libre absolución. El juicio ya había sido convocado para el pasado mes de marzo, aunque finalmente se suspendió, celebrándose en la mañana de ayer.

El fiscal mantuvo su petición de un año de prisión para el acusado, así como la retirada del carné de conducir por treinta meses. No obstante, alternativamente, solicitó que fuese condenado por una falta de lesiones. La acusación particular no se presentó en el juicio.

Según la versión del ministerio público, el accidente se produjo cuando el camionero, que trabajaba para una empresa constructora, circulaba por la calle Matemático Pedrayes, y al llegar a la confluencia con la calle Cervantes, detuvo el vehículo en la intersección, rebasando el tramo de circulación peatonal e internándose un poco en la calle.

Arrastró a la víctima

Cuando vio que tenía posibilidad de entrar en Cervantes, giró a la derecha y, debido a que lo hacía sin prestar atención -siempre según el ministerio público-, arrolló a la nonagenaria, que en ese momento iba caminando por la acera y que, como el acusado había ocupado el espacio peatonal, estaba cruzando por delante del camión. El camión la llevó arrastrando sin darse cuenta hasta que fue advertido por otro peatón.

La mujer sufrió varias lesiones, entre ellas la amputación a nivel del húmero del brazo izquierdo y fracturas. Tardó en curar 168 días, y estuvo ingresada 29. Pese a su edad, la mujer era totalmente independiente y podía desplazarse sin dificultad. A resultas del atropello, quedó impedida para levantarse de la cama o de una silla por ella misma. Aparte de las penas antes citadas, el fiscal pidió una indemnización de 60.000 euros para la víctima.