El grupo parlamentario de Podemos Asturies anunció ayer que presentará un recurso de alzada contra la convocatoria del concurso de traslados de enfermeros, en el que se ofertan 707 plazas, de ellas 181 de atención primaria. El motivo aducido por la formación morada se basa en que el proceso de movilidad voluntaria sólo tendrá en cuenta la antigüedad de los trabajadores, y no otros factores, como su formación específica para el puesto que han de desempeñar. Con este procedimiento, Podemos alberga la "certeza" de que las plazas de los centros de salud -las más anheladas por los profesionales de la enfermería- "serán ocupadas en su mayor parte por el veterano y agotado contingente hospitalario".

La impugnación del partido de Pablo Iglesias se dirige contra el acuerdo de la Mesa Sectorial de Personal Sanitario adoptado el pasado 25 de septiembre. ¿Argumento? Que "excluye a los profesionales de enfermería formados, o con experiencia para trasladarse al mismo ámbito, en atención primaria y comunitaria de las plazas en los centros de salud, a la par que evita subsanar el deterioro de las condiciones laborales en los hospitales". A juicio del grupo de Podemos en la Junta, tanto el Servicio de Salud del Principado (Sespa) como los sindicatos de la sanidad asturiana -entre los que cita a Cemsatse, CC OO, UGT y USAE- han renunciado a "la defensa del sistema sanitario y de los derechos de sus trabajadores".

En similares términos se ha pronunciado la Sociedad de Enfermería Familiar y Comunitaria de Asturias (Seapa). Este colectivo "lamenta" que la antigüedad sea el único mérito computable para poder acceder a una plaza de atención primaria. "Creemos que esta forma de valorar méritos de trabajo va en detrimento de la calidad asistencial que, como sociedad científica y profesional, defendemos".