El exalcalde de Oviedo y líder de la oposición en las filas del PP, Agustín Iglesias Caunedo, mostró ayer su "sorpresa" tras el anuncio realizado por el actual regidor, Wenceslao López (PSOE), sobre el lanzamiento de un concurso de ideas para decidir el futuro de los terrenos del viejo hospital en El Cristo. "Es sorprendente que el Alcalde anuncie un concurso internacional en unos terrenos que no son municipales donde el Principado ya había presentado un proyecto, muy poco ambicioso, cosa que ya habíamos criticado, pero un proyecto", indicó.

Para Agustín Iglesias Caunedo la ciudad sigue teniendo tres asignaturas pendientes en el barrio del Cristo, que urge resolver. "La ciudad de la justicia y la reunificación de las sedes judiciales; los campus universitarios; el futuro de la plaza de toros y los terrenos para un posible recinto ferial son tres asignaturas pendientes del Gobierno del Principado respecto a Oviedo y no están aprobadas ni resueltas", manifestó el portavoz del principal grupo de la oposición en Oviedo.

Iglesias Caunedo, tras analizar las palabras de Wencesalo López teme que su anuncio sea "una cortina de humo ante la falta de actividad del gobierno y la falta de expectativas hacia los vecinos". Además, el concurso de ideas, tal y como se está presentando, no podría llevarlo adelante la administración local, puntualiza el exalcalde. "Los terrenos son propiedad del gobierno de Asturias, que tiene firmado un convenio con la tesorería de la Seguridad Social. Otra cosa es que haya solicitado la cesión de los terrenos y ahora sean de Oviedo... Sería una buena noticia", reflexionó Caunedo sobre el asunto. "Pero lo cierto es que la administración titular de los terrenos, el Principado, tiene un proyecto, malo, pero un proyecto".

En cualquier caso, en sus declaraciones Wenceslao López puntualizó que el Ayuntamiento estaba trabajando en este concurso internacional de ideas para El Cristo "conjuntamente con el Principado" y que ambas administraciones están "en una fase de análisis". En cuanto a los plazos, el actual regidor no fue demasiado optimista: el proceso llevará al menos dos o tres años, según manifestó.