El cuerpo de la Policía Local, con fama de ser uno de los departamentos más polarizados de la administración local, vuelve a ser objeto de investigación judicial. El Juzgado de instrucción número 4 de Oviedo investiga la querella interpuesta por un funcionario contra un superior, en este caso el intendente responsable del gabinete técnico en el cuartel del Rubín. Los dos se verán hoy las caras en los juzgados, donde tendrán que responder a las preguntas de la magistrada que instruye el caso.

La querella fue hecha pública ayer por el sindicato CSIF -antiguo SAF- puesto que el denunciante, Enrique Sierra Maíllo, es delegado sindical en representación de las mencionadas siglas. Según comunicó un portavoz del sindicato, Alberto de Miguel, la relación de los hechos remitida al juzgado "presenta características que hacen presumir la posible existencia de un delito de acoso laboral", según consta en el auto judicial. De Miguel explicó que el "hostigamiento" que viene padeciendo este delegado sindical -afín al anterior comisario principal, Agustín de Luis- desde hace años fue comunicado al departamento de Personal del Ayuntamiento de Oviedo "sin que se adoptase ninguna medida cautelar ni siquiera se hubiera abierto una investigación de información reservada sobre los hechos".

En este sentido, el portavoz del CSIF indica que "llama poderosamente la atención la rapidez con que se incoan expedientes disciplinarios a los agentes de la escala básica y sin embargo cuando son los mandos los que infringen el reglamento disciplinario el Ayuntamiento se inhibe creando una situación de indefensión a las categorías inferiores". También lamentaron desde el sindicato que el Ayuntamiento de Oviedo "no tenga establecidos mecanismos para evitar estos abusos de autoridad a los que son tan propensos los mandos policiales".

En el capítulo de hechos trasladados al juzgado, cita como ejemplo que el intendente denunciado "denegó horas sindicales al delegado, enviando posteriormente un informe falseado al departamento de Personal con la clara intención de perjudicar al trabajador".

Alberto de Miguel también indicó que el mismo intendente contra quien se querella su compañero ha recibido una querella criminal -admitida a trámite- por supuestos delitos de malversación de caudales públicos y enriquecimiento ilícito, así como por la asignación arbitraria e injustificada de las horas extraordinarias, que son utilizadas como herramienta de premio y castigo.

Cuatro mandos de la Policía Local de Oviedo fueron condenados en sentencia firme por un delito continuado de injurias contra la exsargento Mercedes García. Los policías están pendientes de un expediente disciplinario que aún está instruyendo el Ayuntamiento de Oviedo.

Además, el anterior jefe de la Policía Local de Oviedo, Agustín de Luis, será juzgado en la Audiencia Provincial en próximas fechas por paralizar un atestado de tráfico. Se enfrenta a tres años de prisión, según la calificación de los hechos que ha realizado la Fiscalía.