La Policía Local abrió el pasado 27 de agosto un expediente sancionador al advertir que un coche Opel Astra color gris, aparcado en una de las plazas habilitadas a los concejales de la calle Padre Suárez, no tenía visible la autorización municipal que le da el permiso para estacionar allí. Al observar esa infracción, los agentes iniciaron un parte sancionador con su correspondiente tasa de arrastre (84,2 euros) y su multa posterior (unos 190 euros). Sin embargo, minutos después y según la versión del concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Fernández (PSOE), los policías observaron que el mismo coche tenía una "ventanilla bajada" y que, además, había en su interior un bolso y varios enseres personales a la vista, así que decidieron anular el expediente sancionador y llevarse el coche al depósito de la grúa por "razones de seguridad".

Ese coche resultó ser el de la vicealcaldesa, Ana Taboada (Somos), que cuando fue a recogerlo a la grúa no pagó ni arrastre ni multa porque, según explicó ella misma, no le reclamaron nada, "sólo una firma".

Ésta es, resumida, la versión de los hechos que ofreció ayer el edil al respecto de la polémica desatada alrededor de la vicealcaldesa tras la noticia avanzada en exclusiva por este diario. Taboada se defendió insistiendo en que ella no cometió ninguna ilegalidad, que tenía (y tiene) autorización para aparcar allí y que la culpa es del Partido Popular: "Esto obedece a una campaña orquestada por el PP contra mi persona. Están muy nerviosos por lo que estamos denunciando", aseguró la concejala de Somos, que no aclaró si el distintivo estaba bien colocado en el salpicadero, como es obligación. De hecho, a varios concejales de la actual Corporación, alguno de ellos del gobierno, ya les retiró el coche la grúa por el mismo motivo: no tener visible el permiso.

La mañana de ayer fue ajetreada en el Ayuntamiento. Hubo encuentros y llamadas varias entre concejales y el jefe de la Policía Local, José Manuel López, antes de que Somos mandara, a mediodía, un informe policial con ocho puntos. En él se respalda la versión de Taboada: que tiene permiso para aparcar allí, que el coche fue retirado por "razones de seguridad" y que no se le exigió el pago porque no se encontró un "hecho imponible ni falta administrativa". El documento no aclara, sin embargo, si el distintivo estaba bien colocado ni por qué se le abrió un proceso sancionador si, realmente, el coche fue retirado por "razones de seguridad". Fuentes policiales consultadas confirmaron que, "efectivamente", cuando se retira un coche por cuestiones de seguridad no se abre expediente, ni se adjunta la tasa de arrastre ni la multa, documentos existentes en este caso y reproducidos en la edición de ayer de este periódico.

Las incógnitas las trató de responder Ricardo Fernández, al que todo este asunto le cogió durante unos días que se había tomado de descanso. Fernández reveló que, por lo que sabe de la Policía y de la información de LA NUEVA ESPAÑA, hubo tres informes: el primero, en el que se observa un vehículo estacionado sin el permiso visible y por el que se abre el parte sancionador. Y "otros dos" posteriores en los que se "hace una rectificación al proceso sancionador" al observar que había una ventanilla bajada, un bolso y varios enseres. "Lo que tenemos claro es que en estos asuntos todos los ciudadanos deben ser iguales", aseguró el edil.

"Extorsión"

La noticia causó ayer "indignación" entre la oposición. Gerardo Antuña, concejal del PP, criticó a Taboada por acusarles de "orquestar" una "campaña" contra ella. "¿Está diciendo que extorsionamos a los policías?", se preguntó el edil, que añadió que eso sería "muy grave". "A esta señora se le olvidó poner la credencial y el coche se le fue retirado porque no tenía visible la acreditación. Como le ha pasado a más gente", dijo. Luis Pacho, líder de Ciudadanos, aseguró que llevarán al próximo Pleno el asunto. "Queremos saber cuál es el protocolo de actuación de un policía, si de verdad tenía o no visible la autorización", afirmó. "Queremos saber si alguien la eximió de no pagar y quién fue", añadió. Pacho fue contundente: "A una persona normal no le retiran el coche por una ventanilla bajada o por un bolso. Preguntaremos porque igual nos encontramos con que la señora vicealcaldesa mintió", concluyó.