Una decena de niños participó ayer en un taller de elaboración de sidra en el Centro Asturiano del Naranco. Los pequeños aprendieron a seleccionar y lavar las manzanas, a pisar, y a prensar la fruta hasta obtener un mosto que pudieron probar. El objetivo de la clase, impartida en la parte trasera de la bolera cubierta del Club de Campo, es recuperar las tradiciones y enseñar a los más pequeños el origen de la bebida asturiana. Esta sidra el año que viene en las fiestas de Nuestra Señora de Covadonga. En la imagen, niños y monitores, en el taller.