La pista finlandesa ha dejado de estar a oscuras al caer la tarde. Esta semana han entrado en funcionamiento 36 puntos de luz alimentados por paneles solares, desde la calle Pedro Caravia hasta el primer núcleo de viviendas de la vía. La obra forma parte del plan de actuaciones de alumbrado público en el entorno del Naranco que la Junta de Gobierno Local adjudicó en agosto a Electricidad Llano por 212.054 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses. Esta actuación incluye la instalación de alumbrado convencional en la senda que va del Parque de Invierno a Fuso de la Reina, donde los operarios trabajan estos días en la colocación de los apoyos de un total de 60 farolas.

La medida atiende una de las demandas más antiguas de los vecinos de ambas zonas y de los usuarios de sus áreas deportivas, que denunciaron en varias ocasiones la falta de luz en el entorno y la consiguiente inseguridad.

Según la memoria elaborada por el equipo técnico del Ayuntamiento, "si bien el carácter de utilización de estas sendas es esencialmente diurno, dada su longitud y proximidad al caso urbano, se pretende dotar a las mismas de un alumbrado de seguridad que sirva de referencia para el retorno del usuario en las primeras horas de la noche". Además, en las especificaciones técnicas, el texto indica que los paneles fotovoltaicos de la pista finlandesa "deben ser capaces de captar la energía necesaria para su funcionamiento completo, de seis horas, en cualquier época del año". En este caso, el encendido se realizará a partir del ocaso y las luces se apagarán, una vez cumplido el horario, de forma autónoma. El control del alumbrado se hará desde un centro de "telegestión" para supervisar los parámetros de consumo en tiempo real, las alarmas o facilitar el encendido y apagado remoto.

La iluminación en la senda a Fuso, en el tramo entre el Parque de Invierno y la antigua estación de La Manjoya, contará con luces de tipo led -de bajo consumo- de 40 vatios que ofrecerán la posibilidad de dar distintos niveles de iluminación en función de las necesidades. El reglamento de eficiencia energética obliga a afrontar la sustitución de las bombillas del municipio.