El grabado de un bisonte sin cabeza aparece en una de las bocas que la cueva de Los Murciélagos, en el pueblo de Fresnedo, Ribera de Arriba. También, en la cercana caverna de Entrecuevas, hay unos grabados en rojo con formas rectangulares. Estos restos fueron descubiertos por el grupo Polifemo en los años 70.