"En Cataluña hemos pasado de ser conocidos por nuestro dinamismo, por nuestra capacidad para crear proyectos, a convertirnos en una sociedad que se aproxima cada vez más a países como Venezuela". Lo dijo ayer Xavier García Albiol, portavoz del PP en el Parlamento de Cataluña y hasta las elecciones de mayo alcalde de Badalona. Y lo hizo en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA ante un nutrido auditorio, compuesto en su mayoría por cargos del PP ovetense y asturiano y de simpatizantes del partido que preside Mariano Rajoy, que acudieron para escuchar el análisis de García Albiol sobre la deriva independentista en Cataluña. Bajo el título "España, un proyecto de futuro", el político catalán lanzó varios mensajes. El primero, y el más repetido, fue que España no se romperá. "Como a Artur Mas o a los independentistas se les ocurra dar un paso en falso, todo el peso del Estado les va a caer encima", dijo.

Cuando cesaron los aplausos que arrancó de su entregado auditorio, García Albiol prosiguió hablando del artículo 155 de la Constitución, el que permite al Estado suspender la autonomía de cualquier comunidad, en este caso Cataluña. "Ni el gobierno, ni nadie del PP quiere que se tenga que aplicar ese artículo, pero si se tiene que aplicar, que se aplique", aseveró convencido de que "no nos van a temblar las piernas para que Cataluña siga formando parte de ese gran proyecto que es España".

En cuanto a las soluciones que se pueden aplicar para detener la deriva separatista, García Albiol se mostró de acuerdo en reformar la Constitución o en darle la vuelta al sistema de financiación autonómico. Pero siempre, con una condición: en beneficio de todos y "no solo para dar satisfacción de los independentistas".

Y es que el político catalán tiene claro que nada contentará a los secesionistas. "Los independentistas son insaciables. No se quedarían contentos ni con la reforma de la Constitución ni con un mejor modelo de financiación", apuntó. E insistió en su mensaje que el futuro de Cataluña será decidido por todo el Estado. "Si el mapa de España tiene que cambiar, lo decidiremos entre todos", afirmó. García Albiol también analizó la situación del PP en Cataluña. "Hemos iniciado un proceso de recuperación muy importante", presumió, a pesar que reconoció que en Cataluña "hay odio hacia el PP" por parte de determinados sectores y un "ámbito mediático muy agresivo" contra todo lo que huela a los populares.

El exalcalde de Badalona no rehuyó hablar de sus años al frente de los destinos de la tercera ciudad más importante de Cataluña. Y explicó cómo a pesar de haber ganado las elecciones -"obtuvo el 34,5 por ciento de los votos", señaló Susana López Ares, diputada del PP en la Junta General del Principado y que ejerció como presentadora del acto- el poder le fue arrebatado por Badalona en Común (candidatura formada por Podemos y los independentistas) con el apoyo del PSOE y otros partidos. "A la mínima que pueden, tratan de apartarnos (en referencia a los políticos del PP en Cataluña) de cualquier responsabilidad", aseveró.

De igual forma, reconoció ser "contrario al boicot" de los productos catalanes y habló sobre su polémica postura sobre la inmigración. "Hay un determinado tipo de inmigración que tiene que hacer un esfuerzo para adaptarse. Mantener sus valores y costumbres tiene que ser compatible con los valores que se tienen en la tierra de acogida. O se adapta, o se vuelve a su país", sentenció.