El amor por los animales del conserje del colegio público Parque Infantil, en Ciudad Naranco, ha acabado por causar un serio problema de higiene en las instalaciones. La dirección del centro y la asociación de padres se han movilizado y el problema ha llegado hasta la Concejalía de Educación. El conserje, funcionario y con vivienda en el recinto, deja comida a gatos y palomas, según los informes municipales, y los excrementos, plumas y pelos de los animales atraídos por la comida se acumulan y amenazan la salubridad de un espacio por el que transitan a diario los niños.

Las quejas empezaron hace cuatro años, según explica la concejala de Educación, Mercedes González (Somos). La dirección del colegio alertó sobre el comportamiento del conserje y desde la Concejalía de Educación, ya con el anterior equipo de gobierno, se dio le dio un toque de atención que, en vista de cómo se han desarrollado los acontecimientos, él desoyó.

Mercedes González supo de lo que estaba ocurriendo por boca de la directora del colegio y puso a trabajar a los servicios médicos municipales. Hicieron una inspección y confirmaron las deficiencias denunciadas por la directora y, más tarde, también por los padres. Los técnicos del Ayuntamiento recomendaron realizar una limpieza de todo el complejo escolar, incluido el polideportivo, ahuyentar a los animales y evitar que el conserje los cebe. La Concejalía de Educación busca ahora una solución. "Es un tema muy delicado", admite la edil, "porque se trata de un funcionario antiguo municipal que además tiene su domicilio dentro del recinto escolar".